El domingo pasado se vivió una fiesta popular en las calles de la entidad de Quintana Roo- donde la abanderada de Morena, Mara Lezama, fue cobijada por una gran manifestación social que se volcó para refrendar el respaldo al lopezobradorismo, pero igualmente a la representante de la expresión guinda que, de acuerdo con la lógica, será la próxima gobernadora del aquel territorio.

Eso se percibió en un recorrido por las calles donde la multitud se manifestó a favor. Era una gran ola que gritó- entre consignas de apoyo- su inclinación por la candidata de Morena. De hecho, ese momento de consagración se notó por una muchedumbre que está convencida de dar un giro al paradigma tradicional y, por consiguiente, optar por un proceso de transformación que viene encabezando el presidente López Obrador.

Mara se sumará a la lista de triunfos que, prácticamente, tiene amarrada Morena para el próximo mes de junio. Al menos no hay nada que pueda revertir ese contexto pues las propias metodologías de investigación que recolectan el pulso de la sociedad, dan muestras suficientes de que no hay otro escenario más que el triunfo.

De hecho, la ponderación que evalúa el comportamiento muestra cifras elevadas a favor de Mara Lezama. Entre 19 y 20 puntos de distancia del segundo lugar son algunos de los números que sitúan a la candidata de Morena. Por ello, hasta ahora, la abanderada de la alianza Juntos Haremos Historia ganará por goleada en una cancha que domina en todos los ángulos y perspectivas.

Entonces, con esa ventaja que tomó desde el arranque de las campañas, se perfila para ganar la gubernatura. Y se encauza a ese triunfo- porque ha mantenido un buen nivel de participación; recibió todo el apoyo de militantes y simpatizantes de Morena, lo mismo que de los partidos aliados que acompañarán en este ejercicio a Mara Lezama.

Sirvió de mucha ayuda el respaldo que recibió de legisladores de Morena el pasado domingo. Eso la motivó. Se le notó la confianza que transmitió durante el mitin. Fue una efervescencia total; hubo algarabía y entusiasmo de quienes participaron. En otras palabras, una fiesta redonda en un marco perfecto que es, hoy por hoy, idóneo para triunfar. Las condiciones están dadas para que haya transición de colores.

Y con ese marco perfecto, ha sido de gran ayuda, repito, la suma de alianzas que se integraron en un principio. De hecho, Fuerza por México- desde un comienzo había mostrado su interés de refrendar las coaliciones que se construyeron en 2021. Incluso, fue determinante el apoyo en Baja California y Guerrero donde Morena ganó con el respaldo de la ola Rosa que aportó a la causa Gerardo Islas.

Hoy nuevamente se colocan en la misma dirección de Morena. Se justifica. La relación entre Pedro Haces, Gerardo Islas y el presidente López Obrador es cercana, al menos, hay muchos antecedentes de participación en proyectos relacionados a la 4T.

Pero más allá de esa situación que por supuesto es significativa, Quintana Roo vivirá un proceso decisivo y determinante el próximo mes de junio. Faltan más de 20 días y los pronósticos siguen cargados a favor de Mara Lezama que será, con todos los méritos, la próxima gobernadora de aquella entidad. De hecho, ganará por goleada.