La franquicia de Kimetsu no Yaiba ha sido una de las más influyentes del anime moderno y, con Demon Slayer: El Castillo Infinito, entramos en el arco final de la historia.

Si bien Demon Slayer: El Castillo Infinito cumple perfectamente con ser este inicio del final, hay ciertas cuestiones que afectan un poco el resultado final.

3 aciertos y dos grandes defectos de Demon Slayer: El Castillo Infinito

Aquí te damos nuestras 5 razones de por qué Demon Slayer: El Castillo Infinito complacerá a los fans, aunque es bastante desbalanceada:

  1. Demon Slayer: El Castillo Infinito sigue muy bien la trama de la serie
  2. La acción de Demon Slayer: El Castillo Infinito es impresionante
  3. La animación es lo mejor de Demon Slayer: El Castillo Infinito
  4. Demon Slayer: El Castillo Infinito tiene un ritmo bastante atropellado
  5. Demon Slayer: El Castillo Infinito puede cansar a quienes no sean fans
Se agotaron los boletos para el evento especial de Demon Slayer: El Castillo Infinito Kimetsu no Yaiba

Demon Slayer: El Castillo Infinito sigue muy bien la trama de la serie

Demon Slayer: El Castillo Infinito sigue muy bien la trama de la serie, pues empieza exactamente donde terminó la temporada anterior del show.

La película nos presenta lo que pasa con cada uno de los personajes que fueron absorbidos por la fortaleza de Muzan, en un intento por tener su victoria definitiva.

El filme logra transmitir esa necesidad y premura de los cazadores por eliminar al villano.

Esto, en un escenario que representa un peligro en sí mismo, y donde las consecuencias se sienten a cada instante.

Además de que profundiza en las tramas personales de varios de los personajes que vemos en pantalla y que habían sido dejados un poco de lado en la serie.

Lo cual funciona muy bien para darle una mayor profundidad a una obra que, por lo menos en anime, mucho se habían quejado de su abuso de las omisiones, conveniencias y poco desarrollo de algunos personajes.

Demon Slayer Castillo Infinito

La acción de Demon Slayer: El Castillo Infinito es impresionante

La acción de Demon Slayer: El Castillo Infinito es impresionante, los fans no se podrán quejar de nada en este aspecto.

Cada una de las batallas fueron excelentemente cuidadas para se apreciadas en pantalla grande, donde se puede ver mejor todo el despliegue técnico de los guerreros.

Aunque técnicamente solo tenemos 3 peleas —siendo la última la más importante— ninguna desmerece y nos muestra la personalidad de los villanos y héroes de la historia.

Además de que sus estilos de pelea también son una muestra de la personalidad de cada guerrero y nos ayudan a entender mejor las motivaciones de cada uno.

Demon Slayer Castillo Infinito

La animación es lo mejor de Demon Slayer: El Castillo Infinito

La animación es lo mejor de Demon Slayer: El Castillo Infinito, tan solo por esto es que vale ver la película en cine.

La combinación de 2D tradicional con efectos 3D, el uso de paletas de colores dinámicas, y la fluidez de los movimientos hacen que cada escena sea digna de ser admirada.

El castillo, con su arquitectura imposible y sus cambios de perspectiva, hacen que todo se sienta dinámico, incluso en algunos de los momentos de más calma.

Creando así un laberinto que incluso viendo es difícil de comprender.

Además, cada técnica de respiración tiene su propio lenguaje visual, lo que permite al espectador identificar no solo el estilo de combate, sino también la personalidad del personaje que la ejecuta.

Digamos que la acción y la animación van unidas en una simbiosis perfecta, algo que cada vez es más difícil de encontrar en estos días, donde a veces falla una o la otra.

Demon Slayer: Kimetsu no Yaiba Castillo Infinito

Demon Slayer: El Castillo Infinito tiene un ritmo bastante atropellado

Aunque la película es espectáculo y respeta el argumento de la serie, Demon Slayer: El Castillo Infinito tiene un ritmo bastante atropellado en su narrativa.

No sabe equilibrar los momentos contemplativos, con los de mayor intensidad; en un segundo sube las revoluciones, y al siguiente pone un freno sin ninguna construcción previa.

Es decir, cuando estás en un pico de acción, la película decide no dejar que se desarrolle el climax para meter elementos contextuales, que aunque necesarios y bien estructurados, se sienten precisamente “anticlimáticos”.

El filme se mantiene así en todo su metraje, con subiendo y bajando la adrenalina sin previo aviso, lo que hace que también se sienta como 3 películas condensadas en una.

Demon Slayer: Kimetsu no Yaiba Castillo Infinito

Demon Slayer: El Castillo Infinito puede cansar a quienes no sean fans

Demon Slayer: El Castillo Infinito puede cansar a quienes no sean fans, debido a su duración de 2 horas y media.

Si no has tenido todo el bagaje o solo eres público casual, apreciarás la estética y la acción; pero te costará mucho conectar con la mayoría de los personajes, además de que el ritmo atropellado hará que te canses.

Es curioso, pues en esta ocasión la película hubiera funcionado mejor como serie, así no se tendrían los saltos abruptos y le permitiría al espectador hacer una mejor “digestión” de la obra.

Lo cual es un poco triste, pues tiene secuencias contemplativas y de acción que funcionan muy bien por separado, pero que en el ensamble no acaban de embonar del todo.

Demon Slayer: Kimetsu no Yaiba Castillo Infinito

¿Vale la pena Demon Slayer: El Castillo Infinito?

Demon Slayer: El Castillo Infinito es una muy buena película de anime, que destaca sobre todo en su apartado técnico, siendo lo mejor que verás del estilo en mucho tiempo.

Si has seguido la obra hasta este momento, Demon Slayer: El Castillo Infinito es más que un obligado para ti; te aseguramos que saldrás totalmente satisfecho.

Sin embargo, si la franquicia no te desagrada, pero tampoco es tu favorita, le verás varias de sus costuras, principalmente en el apartado narrativo.

Donde la poca fluidez de la trama te sacará en más de una ocasión del filme, haciendo que te preguntes cuánto más falta para que se acabe.