En plenas semifinales del Clausura 2022 hay que darse tiempo para recordar algunas promesas, mitos en el futbol mexicano que se han prometido, pero que a la hora de la verdad no se han cumplido.
Y parece que nunca se cumplirán:
- ¿Algún día se construirá el nuevo Estadio de Cruz Azul?
- ¿Qué pasó con el estadio que se iba a levantar en Acapulco?
- ¿El nuevo estadio de Tigres tendrá fecha de inicio de trabajos?
- ¿Algún día existirá un Sindicato de Futbolistas?
- ¿En serio desaparecerán las barras en el futbol nacional?
El Estadio de Cruz Azul
Cruz Azul se mudó de Ciudad Cooperativa Cruz Azul, a la Ciudad de México, por el crecimiento que tuvo el equipo en los 70.
Tomó al Estadio Azteca como su casa. Años después, se mudó al Estadio Azul, conocido como Estadio de la Ciudad de los Deportes y ahora volvió al Azteca.
Entre todas esas mudanzas, la directiva anterior, de los Álvarez y la actual, de Víctor Velázquez, han prometido que la Máquina tendrá su propia casa, su propio estadio.
Pero pasan los años y nada. Ni terrenos, ni proyectos, ni un plano que confirme que los aficionados cementeros, en algún momento, tendrán a dónde ir a ver a su equipo.
El Estadio de Acapulco
En el 2014, se anunció con bombo y platillo que la ciudad de Acapulco, Guerrero, tendría su propio estadio de futbol.
El proyecto era encabezado por el empresario Mohamed Morales, quien en ese entonces era dueño de los Tiburones Rojos del Veracruz, y hasta comenzó la venta de palcos.
Un año después, Morales desapareció y el proyecto ha quedado abandonado.
Año tras año, la promesa de los políticos acapulqueños es que por fin el estadio de Acapulco terminará su construcción.
Este año, con Manuel Negrete como presidente del Fideicomiso de Promoción Turística de Acapulco, se ha prometido, otra vez, que el puerto tendrá su estadio.
¿Cuándo comenzará la construcción del estadio del Club Tigres?
El pasado 13 de enero, San Nicolás de los Garza, se vistió de gala con la presentación del que será el nuevo Estadio del Club Tigres.
Con todo el apoyo del actual gobernador de Nuevo León, Samuel García, se dijo que el costo del nuevo estadio, que estará en el mismo sitio que el actual, Universitario, será de alrededor de 320 millones de dólares (6,381 millones de pesos).
Se habló que los trabajos iniciarían de inmediato, pero han pasado ya cuatro meses, y no hay ni siquiera, fecha de inicio del nuevo estadio del Club Tigres.
¿Para cuándo el Sindicato de Futbolistas en México?
Los futbolistas mexicanos han peleado durante muchos años sus derechos.
Muchos han pujado por la creación de un Sindicato de Jugadores, que reclamen lo justo a los dueños de los equipos.
Pero han pasado los años, y todo ha quedado en falsas promesas.
Desde los 60 con el intento de huelga de Carlos Albert; pasando por el Sindicato registrado por José María Chema Huerta, hasta la actualidad con la Asociación Mexicana de Futbolistas Profesionales, nada de esto se ha concretado.
Es verdad, actualmente el jugador mexicano ya no está tan desprotegido como en años anteriores, pero un derecho tan peleado como lo es estar sindicalizado, se le ha negado aún.
¿Desaparecerán las barras?
A inicios de siglo, la Federación Mexicana de Futbol realizó un Congreso de Porras, con la intención de que las barras desaparecieran.
Pasaron los años, y se presentaron incidentes violentos en varios estadios, estos protagonizados por las barras bravas, grupos de animación que habían aprendido costumbres sudamericanas.
Se prometió credencialización, y nada; se prometió prohibirles la entrada a los estadios y nada.
Ahora que se vive otra ola de violencia, la Liga MX y la Federación Mexicana de Futbol, aseguran que ahora sí, desaparecerán estos grupos violentos.
¿Se les puede creer?
