Una noche de terror se vivió en Avellaneda durante el partido de vuelta de los octavos de final de la Copa Sudamericana entre Independiente y la U de Chile. La violencia apareció en el Estadio Libertadores de América que atestiguó imágenes de alto impacto y las decenas de heridos a raíz de los enfrentamientos entre hinchas de los dos equipos.

Miles de aficionados de la U de Chile viajaron hasta Buenos Aires para el partido entre su equipo e Independiente y fueron ubicados en la tribuna sur alta del Estadio Libertadores de América. En todo momento, los chilenos arrojaron objetos hacia la parte baja de inmueble, lo que provocó algunos heridos por proyectiles, pero el juego de Copa Sudamericana nunca se detuvo y luego vino el terror por la violencia.

Los seguidores de Independiente empezaron a colgarse del alambrado e invadir el terreno de juego a causa de los objetos que la gente de la U de Chile. Incluso, aficionados reportaron que lanzaron hasta un inodoro entero desde la tribuna superior, además de piedras, palos y hasta bolsas con heces fecales.

Hinchas de Independiente atacaron fuertemente a los de la U de Chile

Ante la falta de intervención policial, un sector de la barra de Independiente le dio la vuelta al estadio y empezó a ingresar a la tribuna donde habían ubicado a los hinchas de la U de Chile. Ahí fue donde la barbarie comenzó porque los aficionados argentinos golpearon a los andinos sin piedad.

Los seguidores de Independiente atacaron con brutalidad a los de la U de Chile y a muchos los despojaron de su ropa. Muchos fueron vistos en imágenes televisivas y fotografías ensangrentados y en calzones tras haber sido golpeados en las tribunas de Avellaneda.

Por ahora, no ha habido partes médicos oficiales sobre el estado de salud de los heridos; sin embargo, diferentes versiones han manifestado que en el Hospital Fiorito hay hinchas de la U de Chile en estado de salud grave debido a los golpes recibidos en la cancha de Independiente.

La seguridad brilló por su ausencia en incidentes de violencia entre Independiente y la U de Chile

Uno de los puntos más llamativos en medio de los hechos de violencia entre hinchas de Independiente y la U de Chile fue la intervención de los cuerpos de seguridad, toda vez que nunca hubo policía que custodiara a los aficionados chilenos e impidiera que arrojaran todo lo que tuvieron a la mano hacia su contraparte argentina.

La policía intervino hasta que la gente de la U de Chile abandonaba el estadio y ahí efectuaron algunas detenciones mientras intercambiaban insultos con aficionados de Independiente, pero antes no hicieron nada por impedir los incidentes de violencia.

Así, una noche negra para el futbol se vivió en Avellaneda, con hinchas heridos de gravedad, golpeados con brutalidad, despojados de su ropa y con un operativo policial que brilló por su ausencia.