Una pipa de gas explotó la tarde de este miércoles 10 de septiembre, cerca de la estación Santa Marta del Metro CDMX.
Hasta el momento, la tragedia ha dejado un saldo de: tres personas muertas y al menos 57 heridas. Entre ellas, 19 presentan quemaduras de segundo y tercer grado.
En redes sociales, los videos de la explosión se viralizaron en segundos, mostrando a personas afectadas por la explosión, en shock y con la ropa desgarrada, mientras esperaban ayuda.
¿Qué NO se debe hacer cuando alguien sufre quemaduras de segundo y tercer grado?
Algunos transeúntes intentaron auxiliar a los heridos por la explosión de la pipa, mojándolos con agua fría, lo que fue un grave error ¿Por qué?
Cuando una persona padece quemaduras de segundo y tercer grado, este acto puede empeorar el daño que han padecido, causando un choque térmico capaz de empeorar los daños en tejidos profundos.

Otras cosas que parecerían correctas para atender quemaduras de segundo y tercer grado, pero que no se deben hacer, son:
- Reventar las ampollas; estas ayudan a proteger contra las infecciones.
- Aplicar remedios caseros, como mantequilla, aceite o pasta de dientes; estas sustancias pueden atrapar el calor y causar infecciones.
- Quitar la ropa que esté pegada a la quemadura. Esto podría aumentar el daño en los tejidos.
- Usar hielo, ya que su temperatura puede dañar aún más los tejidos y provocar necrosis.

¿Qué SÍ se debe hacer cuando alguien sufre quemaduras de segundo y tercer grado?
La Secretaría de Salud recomienda tomar las siguientes acciones como manejo inicial de una quemadura:
- Retirar anillos, relojes, cinturones, prendas ajustadas que puedan comprimir la zona lesionada, antes de que ésta se inflame
- Colocar al lesionado en una posición cómoda, evitando que la zona lastimada entre en contacto con el suelo o algún otro objeto
- Enfriar la zona lesionada con agua limpia por 15 segundos y cubrir la lesión con una gasa o una manta limpia
- Acudir a unidad de salud

¿Cómo se clasifican las quemaduras?
Por el grado de afectación, las quemaduras se clasifican en:
- Quemaduras de primer grado: Afectan solo la epidermis. los síntomas son enrojecimiento, ardor, dolor leve, inflamación moderada, no causan ampollas.
- Quemaduras de segundo grado: Estas se dividen en superficiales, que provocan daños en la epidermis y parte de la dermis. Sus síntomas son: ampollas, dolor intenso, piel enrojecida, gran sensibilidad. También hay quemaduras de segundo grado profundas, que implican daños en la capa media de la piel y en las glándulas de sudor o las glándulas productoras de grasa.
- Quemaduras de tercer grado: Destruyen todas las capas de la piel, incluso músculo y hueso. Los síntomas son: piel carbonizada, no hay ampollas, sin dolor por daño nervioso.
