El 31 de agosto del 2022 quedará en la memoria de la historia política mexicana como el día de “La Tregua de San Lázaro”.

El consenso y la pluralidad lograron ayer que en la Cámara de Diputados se hablara el mismo idioma; que el recinto legislativo dejara de ser una Torre de Babel para convertirse en la expresión de un México de todas y todos.

Por la tarde, poco a poco comenzaron a llegar a sus curules las diputadas y los diputados que habrían de sesionar y votar la propuesta de la nueva Mesa Directiva en esta 65 Legislatura. Pero a diferencia de otras ocasiones, cuando las corrientes políticas llegan preparadas para darse con todo y hacer del pleno un campo de batalla, donde por momentos los desencuentros han ido más allá de un debate en la tribuna; esta vez la cosa fue diferente, se sentía un ambiente menos denso, a las y los legisladores se les veía ligeros. No, ayer no traían puesta la armadura de su ideología.

Sucedió entonces, el reloj electrónico del salón de sesiones marcaba las 7:25 de la tarde; se pintó de verde el número de votos a favor 455, mientras que el color rojo de los votos en contra, no se movió y el cero se quedó hasta que se cumplió el plazo y la votación se dio por concluida. La nueva Mesa Directiva estaría entonces compuesta por 10 mujeres y un hombre.

Fue electo como presidente de la Cámara el Diputados Santiago Creel Miranda, y ni para las diputadas y los diputados pareció extraño, a nadie sorprendió su llegada, por momentos parecía que se vivía un agradable dejá vu porque cuando el panista había ejercido la función de presidente como lo marca la ley, en ausencia del titular de este poder, habría hecho un trabajó extraordinario, reconocido por los líderes de las demás bancadas, por eso este nombramiento de Creel Miranda no cayó de sorpresa, ni tampoco incomodó a nadie.

Era un Santiago visiblemente emocionado, durante el momento de su protesta, esta vez su voz no solamente llevaba palabras, traía también un tono especial, un tono de orgullo nacional y de profundo amor por México.

En su discurso, Creel se dirigió a sus compañeras y compañeros Diputados con ese oficio que lo tiene hoy como titular de un Poder. Les agradeció su confianza, les pidió compartir con él las ideas y experiencia de todas y todos. Mandó un mensaje muy contundente de pluralidad y apertura para todas las ideas.

El legislador pasó a la muy selecta lista de políticos mexicanos que han ocupado la Presidencia de ambas cámaras, senadores y diputados, por algo será.

Vale la pena destacar la relevancia de este hecho. Porque a la par en la Cámara de Senadores ocurría lo mismo, se renovaba también la Mesa Directiva, solamente que allá el consenso no se logró a la primera votación, y mucho menos a la segunda. Por eso llama mucho la atención la gran operación política que logró Santiago Creel en la Cámara de Diputados, comenzando por conseguir el aval absoluto de todas las fuerzas políticas por conducto de cada uno de sus coordinadores y lograr acuerdos entre los 500 Diputados, algo mucho más retador que hacerlo entre 128 Senadores, no es opinión personal, es pura matemática.

Una vez finalizada la votación y el conteo, se entonó el Himno Nacional y al término se escuchó entre los legisladores un “¡Viva México! – seguido de un grito de “¡Viva!” a una sola voz, en el mismo idioma; en el idioma de la democracia.

Minutos más tarde el nuevo presidente del Congreso, compartió un mensaje en sus redes sociales al pueblo de México

Un momento lleno de simbolismos, y un Santiago Creel que reflejaba la confianza que prácticamente todas y todos los Diputados pusieron en él, en su experiencia y en su sensatez. Acompañado por una Constitución y por cuatro banderas de México que de inmediato armonizaron con el liderazgo positivo del nuevo titular del Poder Legislativo.

En su mensaje, Santiago fue claro al decir que “la ley es la ley”, y que el Congreso es un Congreso de la Unión, y no de la división.

Los contrastes son evidentes, el presidente López Obrador pide pobreza franciscana, y Santiago Creel hace un llamado para alcanzar la grandeza mexicana, así la visión de un demócrata hecho para México.

Julio Cabrera en Twitter: @julio_cabrera