México.-  La decisión de Julián LeBarón de abandonar el Movimiento por la Paz, con Justicia y Dignidad está convirtiéndose en el tema principal del día. 

Fue a través de una carta enviada al MPJD en la que el activista, hermano de Benjamín LeBarón, asesinado en Galeana, Chihuahua, dijo que el Movimiento se había alejado de los métodos efectivos propios de la resistencia civil pacífica para convertirse en interlocutor con partidos políticos y gobierno “instituciones que no pueden ayudar sin dividir más, endeudar y fracasar más como intermediarios de la sociedad”. 

Esa decisión ya había manifestado al propio Javier Sicilia, uno de los pilares del Movimiento, a lo que al respecto el poeta consideró que en la misiva “hay una equívocada apreciación, ya que nosotros no hemos apostado nada más al diálogo con el presidente y los poderes, esa es sólo una parte de lo que se ha hecho”, toda vez que “en el centro del Movimiento está el diálogo entre las víctimas de la violencia, el diálogo con organizaciones civiles, así como la movilización, esa es la verdadera impronta del Movimiento por la Paz”. 

Sobre la decisión también opinó otro de los integrantes del Movimiento: Emilio Álvarez Icaza. 

El ex ombudsman capitalino dijo que “a los ciudadanos no les toca sustituir a los gobernantes, pues para eso les pagamos, para que trabajen y den resultados; lo que nos toca es exigir que funcionen, sí nos toca demandar, sí nos toca inclusive construir, porque creo que la sociedad forma parte del Estado”. 

También subrayó que el diálogo con las autoridades “sólo es una de las distintas estrategias emprendidas por el Movimiento por la Paz, y no la única”. 

Los dos activistas aseguraron que a LeBarón “se le quiere y se le respeta”. 

El portal Animal Político retoma la versión de Javier Sicilia sobre un encuentro con LeBarón en Cuernavaca, ocurrido hace 20 días. 

“Julián fue a la casa, me dijo que quería platicar conmigo y yo se lo agradezco mucho –narra el poeta–. Nos queremos mucho, somos hermanos de dolor y hermanos de corazón. Así que lo invitamos a comer a Cuernavaca, conversamos y me comentó su decisión. Yo le dije: ‘Julián, no tiene sentido hacerlo explícito’, pero él se empeñó”. 

El escritor considera que “esa fue la forma en que siempre ha estado Julián en el Movimiento: participa por momentos en las actividades colectivas, luego se concentra en su lucha personal, y así ha sido siempre, así hemos vivido a Julián, con esa libertad, así lo hemos sentido, así lo hemos y seguiremos amando, por eso me queda la incógnita de por qué explicitarlo”. 

Señala que sobre la plática en Cuernavaca: “Nunca me aclaró bien la razón de hacer explícito algo que así había sido siempre, y pues yo le contesté, ‘Julián, no estoy de acuerdo en que lo hagas público, ya que así has estado siempre, pero si lo quieres hacer público te acompaño, sabes que siempre he estado contigo y, si así te sientes mejor, si así sientes que tu voz será más fuerte, te acompaño, ya sabes que en el Movimiento a nadie se le determina, cada quién está cómo quiere estar y hasta donde quiere’.” 

Sicilia aseguró que seguirán llamado a Julián para que participe en algún punto donde esté el Movimiento.