México.- En The New York Times (NYT), se advirtió sobre peligro del nuevo coronavirus para migrantes que esperan asilo en albergue de Matamoros, Tamaulipas.

En el artículo "La fosa común inminente en la frontera", Karla Cornejo Villavicencio señala que más de 2 mil 500 personas se encuentran hacinadas en un campamento de migrantes.

Mientras esperan el asilo de Estados Unidos, se encuentran en condiciones insalubres y de desnutrición, señala la comunicadora en su texto del que da cuenta Reforma.

Cientos de extranjeros y mexicanos se encuentran en Tamaulipas a la espera de asilo humanitario de Estados Unidos. Mientras esperan ser llamados por funcionarios de la Oficina de Aduanas e Inmigración (CBP, por sus siglas en inglés), algunas familias duermen a la intemperie, otras bajo lonas y casas de campaña que organizaciones humanitarias y religiosas.

Viven bajo la amenaza constante del virus

En el texto publicado por NYT, Karla Cornejo Villavicencio da una descripción de lo que considera espacios hacinados e insalubres en los que viven los migrantes, los cuales carecen de energía eléctrica o agua potable.

Están "bajo la amenaza constante" del coronavirus, señala la escritora de The Undocumented Americans, "todo por ejercer su derecho humano a reclamar asilo".

Reforma hace notar que Cornejo fue una de las "dreamers" del Gobierno de Barack Obama, que benefició a indocumentados que llegaron a Estados Unidos en su niñez.

Incluso, señala que la Unicef y "prácticamente" todos los voluntarios desaparecieron del campamento, salvo Médicos Sin Fronteras, organización que da algunos servicios, así como Global Response Management (GRM).

Llamado a retirar a migrantes de campamento

En el texto publicado por NYT, la comunicadora señala que el director ejecutivo de GRM, quien es enfermero, advierte que al interior del campamento habían cinco pacientes con síntomas de Covid-19 y aunque fueron reportados a las autoridades locales, se les negaron pruebas.

Comentó que se solicitó que estos migrantes fueran retirados del campamento y se les trasladara a hoteles cercanos, sin embargo, las autoridades migratorias mexicanas "no han autorizado el traslado".

Karla Cornejo Villavicencio indica que, según GRM, los cinco hospitales públicos de Matamoros tienen sólo 10 ventiladores y 40 camas de cuidados intensivos.