México.- Luego del allanamiento a la casa de la periodista Lydia Cacho en Quintana Roo, la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) condenó la agresión y la calificó como “altamente preocupante” pues sustrajeron su trabajo periodístico, varias pertenencias, mataron a una de sus mascotas y a la otra la envenenaron.

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Mediante un comunicado, la Comisión demandó a las autoridades locales agotar las líneas de investigación, especialmente las que se relacionen con su labor periodística y de defensa de derechos humanos

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Finalmente, la CNDH aseguró que acompañará la evolución e investigación del caso para encontrar a los responsables y sancionarlos. Recordó la importancia de acceder a la justicia pues 99% de los crímenes contra periodistas están impunes. 

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Por otra parte, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, a través del coordinador de Comunicación Social, Jesús Ramírez, rechazó la intimidación y amenazas contra la periodista Cacho y refirió que están trabajando para garantizar la libertad de expresión

También los senadores Emilio Álvarez Icaza y Martha Lucía Mícher condenaron la agresión, la calificaron de “inaceptable” y solicitaron la intervención del subsecretario de derechos humanos, Alejandro Encinas, así como de la Fiscalía General de la República (FGR). 

Represalia al trabajo periodístico de Lydia 

El día de ayer se informó que el domicilio de la periodista Lydia fue allanado el domingo 21 de julio, incidente que fue interpretado como “un acto de represalia” debido a su labor por la defensa de los derechos humanos y la libertad de expresión.

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De su casa robaron parte de su equipo de trabajo: una grabadora de audio, 3 cámaras fotográficas, varias tarjetas de memoria, una computadora portátil y 10 discos duros con información de “alto interés público” vinculados a casos de pederastia.

Ante ello, Lydia Cacho se pronunció a través de su cuenta de Twitter y aseguró que sus investigaciones periodísticas se encuentran seguras fuera de México, porque lo que se llevaron eran sólo copias.

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Actualmente, la periodista está en busca de justicia contra los responsables que la torturaron en 2005 tras la publicación del libro “Los demonios del Edén”, donde exhibió una red de pederastia que operaba en Puebla y Quintana Roo junto al entonces gobernador, hoy prófugo, Mario Marín.

Violencia contra periodistas en México 

El ataque a Lydia Cacho recordó que la violencia contra periodistas ha obligado al desplazamiento forzado de algunos comunicadores, quienes abandonan sus hogares y trabajos para ponerse a salvo junto con sus familias, lo que hasta ahora no es una situación controlada por el gobierno federal. 

Durante el sexenio de Felipe Calderón se registraron 77 homicidios contra periodistas, en el Enrique Peña Nieto se llegó a la cifra de 66 víctimas; y hasta mayo de 2019, sumaban 13 periodistas asesinados con López Obrador.