Parece que los videojuegos sí tiene un efecto negativo en la niñez y no es precisamente por la violencia; más bien por algo que siempre se ha criticado: el hacer a menores de edad antisociales. No obstante, esto va enfocado a un género, siendo las niñas las que ven disminuidas sus habilidades sociales si son expuestas a los interactivos de manera "temprana".

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Lo anterior lo reveló un estudio realizado por la Society for Research in Child Development en Noruega, el cual puso a 873 infantes a jugar interactivos durante un lapso de 6 años (de los 6 a los 12 años). Posterior a esto se dedicaron a hacer preguntas a los pequeños involucrados, así como a su padres y personas cercanas.

El resultado fue que los niños no tuvieron un cambio significativo en sus relaciones o actividades cotidianas durante ese tiempo; no obstante, se mencionó que las niñas sí habían cambiado, prestándole más atención a su tiempo de juego que en desarrollarse en su en torno, lo que incluía el entablar o fortalecer los aspectos sociales de su vida.

Personas con sobrepeso gustan más de los videojuegos

Además, se reveló que los niños y niñas con sobrepeso gustan más de los videojuegos que aquellos que son esbeltos; esto como una manera de llenar su necesidad de pertenencia que podría ser negada en su entorno social debido a su aspecto físico. No obstante, los investigadores señalan que las personas con un alto indice de masa corporal son más propensas a tener una vida social débil de facto.

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A pesar de estos datos, la investigación ha sido cuestionada por diversas personas, incluyendo videojugadoras, pues no están de acuerdo con esa afirmación; al contrario, señalan que el adentrarse en el mundo de los videojuegos les ha ayudado a mejorar su autoestima y entablar amistades duraderas con hombres y mujeres que tiene la misma afición.

Con información de GameRant.