David Ferrer, ex N°3 de mundo, se despidió del ATP 500 de Barcelona luego de caer ante su compatriota Rafael Nadal, quien se calificó a los cuartos de final del certamen. 

Ferrer, quien se encuentra en una gira de despedida, terminó su participación en el que es su penúltimo torneo oficial, el Conde de Godo, y qué mejor manera de hacerlo que ante su compatriota, quien busca coronarse por duodécima ocasión en este certamen. 

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El nacido en Mallorca se llevó el partido en dos sets por un contundente marcador de 6-3 y 6-3 y avanzó a los cuartos de final. 

Al finalizar el partido, Ferrer fue cobijado por los aplausos de la afición de Barcelona y del propio Rafael Nadal, quien aseguró fue un día emocional. 

“Fue un día emocional. Muy triste decirle adiós a un buen amigo”. 

Por su parte Ferrer, quien recibirá un homenaje el próximo domingo antes de la final, señaló que dio todo en la pista y que fue un honor haber perdido ante su compatriota. 

"Lo he dado todo en la pista, creo que he jugado bien, tuve mis opciones. Es un honor perder contra Rafa en mi último partido aquí”. 

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Fue un día especial para el ATP 500 de Barcelona, aunque el espectáculo debe continuar con Rafael Nadal, máximo candidato al título, enfrentando al alemán Jan-Lennard Struff, quien viene de derrotar al griego Stefanos Tsitsipas.