Las tragedias están siempre a la vuelta de la esquina esperando a que el más mínimo descuido ocurra para presentársele a quien menos lo espera. Sin embargo, hay quienes aún enfrentándose a lo que parece su inminente destino, logran salvarse. 

Así ocurrió a un par de trabajadores del Departamento de Bosques del Santuario de Vida Silvestre Muthanga, en la India, que de un momento a otro comenzaron a ser perseguidos por un tigre que vive en libertad dentro del lugar. 

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Los hombres iban a bordo de una motocicleta y el copiloto grabó toda la escena en la que por instantes parece que el tigre está a punto de alcanzarlos e incluso en un momento hace además de prepararse para saltar sobre ellos, pero el conductor logra acelerar y el animal se queda atrás perdiéndose entre la hierba crecida. 

¿Animales peligrosos?

Aunque este caso ha causado asombro en todo el mundo, esta clase de acontecimientos son mucho más comunes de lo que cabría esperarse, y tristemente, no siempre terminan como una simple anécdota. En muchas ocasiones, en estos encuentros fortuitos, algún humano o un animal terminan heridos o perdiendo la vida.   

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Un ejemplo de cómo la interacción de humanos y animales salvajes no siempre termina bien se dio a conocer hace apenas unas semanas y causó indignación en todo el mundo. 

Hablamos del caso de un oso negro que fue sacrificado por las autoridades de Oregon, Estados Unidos por considerarlo demasiado amigable con los humanos. Según trascendió, el animal vivía libre en una reserva, pero la gente lo alimentaba continuamente y a causa de ello permitía los acercamientos e incluso se dejaba tomar fotografías. 

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Los expertos argumentaron que los animales que tienen mayor interacción con humanos, son los más propensos a atacar y que eso impedía la opción de reubicarlo o de permitirle seguir viviendo.