Los derechos humanos de los civiles y militares siempre serán vulnerados y violados en los conflictos bélicos, la paz no llega iniciando la guerra. Es urgente un alto al fuego entre las naciones; las guerras de los hombres perjudican a los más vulnerables.

“La ONU registró al menos 33.443 muertes de civiles en conflictos armados en 2023, lo que representa un aumento del 72% en comparación con 2022, y la proporción de mujeres y niños muertos se duplicó y triplicó, respectivamente”, (Naciones Unidas).

Yasuaki Yamashita, sobreviviente de la Segunda Guerra Mundial, estuvo en la Ciudad de México y afirmó ante decenas de estudiantes que los derechos humanos no existen cuando hay una guerra.

Él era un niño de 6 años de edad cuando el avión bombardero Bockscar, lanzó -el 9 de agosto de 1945-, durante la II guerra mundial, la bomba atómica sobre Nagasaki, Japón.

Las muertes masivas y el sufrimiento humano son consecuencias inevitables de cualquier guerra, generan grandes oleadas de desplazados, tanto internos como externos, esta situación afecta varios derechos, incluida la vivienda, la salud y la educación, generando crisis humanitarias.

Las columnas más leídas de hoy

¿Cuántas crisis humanitarias deben presentarse en el mundo para crear conciencia sobre el respeto a los derechos humanos? ¿Cuántos deben morir para crear más conciencia sobre la violencia que prevalece en el planeta?

En los conflictos bélicos las poblaciones más vulnerables, como mujeres, niños, niñas, adultos mayores y personas con discapacidad, son las más afectadas. Las mujeres enfrentan un riesgo mayor de violencia sexual y explotación, mientras que los niños y adolescentes pueden ser reclutados como soldados o víctimas de abusos.

Existen tratados y convenios que abordan la protección de los derechos humanos en contextos de conflicto. Derecho Internacional Humanitario: Este conjunto de normas se aplica durante los conflictos armados y busca limitar sus efectos, protegiendo a las personas que no participan en las hostilidades y regulando los medios y métodos de guerra.

El respeto a los derechos humanos en dichos contextos enfrentan múltiples desafíos, como la falta de acceso a zonas de guerra, el debilitamiento de instituciones de derechos y la impunidad.

Sin embargo, también existen oportunidades para avanzar en la protección, las organizaciones locales e internacionales pueden jugar un papel clave en la vigilancia y promoción de los derechos humanos, incluso en situaciones de crisis.

La colaboración entre países y organizaciones no gubernamentales puede mejorar los esfuerzos para proteger los derechos humanos en situaciones bélicas, la protección de los derechos no solo es un imperativo moral, sino una necesidad para alcanzar la paz duradera y la justicia.

Es fundamental que la comunidad internacional continúe trabajando para prevenir conflictos y garantizar que, incluso en las circunstancias más difíciles, el respeto por los derechos se mantenga en el centro de todas las acciones. Ya no queremos más muertes.

A lo largo de la historia, múltiples guerras y conflictos han revelado las violaciones sistemáticas de estos derechos, lo que ha suscitado un análisis profundo sobre cómo el marco de derechos humanos puede aplicarse en tiempos de crisis bélicas.

¿Cuántas pérdidas de vidas humanas faltan para generar empatía entre los gobernantes y gobernados?

La deshumanización es alarmante.