México, D.F.- Desde que Enrique "el cobarde, asesino" Peña Nieto, como lo llamaron alumnos, daba su ponencia en la Universidad Iberoamericana, lugar donde no fue bien recibido, su equipo de seguridad liderado por Gustavo Cuevas Gutiérrez conocido como "el guero" planeaban su salida.


 

Su atropellado discurso terminó y todos los estudiantes se preguntaban, ¿dónde esta el asesino? mientras gritaban "La Ibero no te quiere", querían perseguirlo, encontrarlo y gritarle en su cara lo sucedido en Atenco.

 

El primer rumor fue que Peña Nieto se fue en uída por un tunel, todos corrieron hacia el lugar, sitio donde además se asesino se ganó el adjetivo de "cobarde".

 

A Peña nunca se le vio, por lo que todos corrieron a la explanada principal y siguieron gritando sus consignas como "se ve se siente, Enrique delincuente" y elevaron sus pancartas.



El segundo rumor fue dado a conocer por las personas de Radio Ibero los cuales decían que Enrique se encontraba encerrado y escondido en un baño". Todos los estudiantes, todas las consignas y todas las pancartas fueron llevadas al edificio donde se encontraba Peña Nieto. El rumor fue cierto, el ex gobernador mexiquense se encontraba resguardado en una oficina.




En conjunto el gran equipo de seguridad de Peña Nieto y el de la Ibero obstaculizaron el paso para no dejar pasar a los estudiantes inconformes. Después alguien gritó "va a bajar por el elevador", los elementos que lo protegen crearon una valla humana en las escaleras. Los estudiantes se enfurecieron, querían pasar, no era justo que elementos ajenos a su institución les obstaculizaran el paso, "pago mis colegiaturas, dejenme pasar" "larguense, no son de aquí nacos" gritaron y volvieron a gritar. Los elementos nunca dejaron pasar.

 

"Somos estudiantes, no somos asesinos", "da la cara cobarde" "estos jóvenes no van a votar por ti" seguían gritando. Al final el candidato de la Coalición Compromiso con México, se salió con la suya, pudo salir sin encarar a ningún estudiante de la Universidad Iberoamericana, impecable, intacto, "listo para posar para la próxima foto", "Enrique, el asesino cobarde Peña Nieto" le comentó un estudiante a otro.