México.- “Soy totalmente inocente”, asegura el General de División Diplomado del Estado Mayor en situación de retiro Tomás Ángeles Dauahare, quien subraya que si hay un proceso transparente, con una investigación a fondo “saldré libre”. 

En entrevista telefónica con el diario Reforma, desde el Centro Federal de Investigaciones de la Procuraduría, donde se encuentra bajo arraigo, el militar quien asegura que no cree tener enemigos, considera que la carrera militar es de mucho sacrificio, pero que le ha dado muchas satisfacciones. 

"Del deber cumplido, del éxito de cada una de las tareas que enfrentamos, en fin, situaciones de ésas. Ascensos por méritos, carrera de competencia, y siempre da gusto sobresalir", indica el general, quien asegura que el Ejército mexicano fue y es su pasión, y que ha mantenido el honor de la Institución y de la larga estirpe de militares a la que pertenece. 

Dauahare manifiesta optimismo, pese a la situación en la que se encuentra, pues considera que el “que el que nada debe nada teme". 

Al hablar sobre su relación con Estados Unidos, Ángeles Dauahare destacó en la plática que durante sus dos estancias en la Agregaduría Militar en la Embajada de México en Estados Unidos, de 1984 a 1986 y de 1992 a 1994, su relación con el Ejército de EU y las agencias de inteligencia de ese país fue respetuosa.

Subraya, incluso, que no hubo dudas hacia su persona por parte del Gobierno de Estados Unidos. 

Cuestionado sobre su seguridad dentro del centro de arraigo, Ángeles Dauahare comentó que se siente seguro porque dentro del lugar hay mucha vigilancia, aunque él no cuenta con seguridad especial pese al rango de servidor público que ocupó en la Sedena. 

Detalla que lo tienen apartado del resto de la población del centro de arraigo. 

Ángeles Dauahare agradeció las muestras de apoyo que ha recibido y pidió a su familia que no desmayen. 

"Que la tranquilidad y fortaleza de ellos es la mía", apuntó. 

Cabe recordar que Tomás Ángeles Dauahare fue señalado por la Procuraduría General de la República (PGR) de presuntamente haber colaborado para el Cártel de los Beltrán Leyva y Édgar Valdez Villarreal, "La Barbie". 

Fue detenido el 15 de mayo pasado por la Policía Militar para cumplir una orden de presentación girada por la Coordinación A de Delitos contra la Salud de la PGR. El 16 de mayo, la PGR solicitó a un juez dictar su arraigo por 40 días. 

A Dauahare, quien fue un hombre muy cercano a Los Pinos, y se reunía con el entonces Jefe de la Oficina de la Presidencia de la República, Juan Camilo Mouriño, y Felipe Calderón, no le han librado orden de aprehensión en su contra, y tampoco se ha girado una orden de cateo a sus propiedades. 

Durante sus 44 años de carrera militar, ha ocupado las posiciones más importantes en la Secretaría de la Defensa Nacional, la última de ellas como Subsecretario de la Sedena por designación de Calderón.

Además de Dauahare, fueron detenidos el General Brigadier Roberto Dawe, el General de División Ricardo Escorcia Vargas y el Teniente Coronel de Caballería retirado Silvio Isidro de Jesús Hernández Soto. 

Felipe Calderón, desde Barbados, se refirió el lunes pasado por primera vez, después de seis días de ocurridas las detenciones, al tema de los militares detenidos por presuntos nexos con el crimen organizado. 

"Lamento y condeno el que algunos, y muy individualmente señalados, algunos miembros de las mismas, según las evidencias encontradas tanto por la PGR como por la Procuraduría Militar, hayan incurrido en actos ilícitos y lo único que queda claro aquí es que mi Gobierno no tolerará actos contrarios a la ley, vengan de donde vengan", dijo en Barbados. 

"El hecho de que sea el Ejército mexicano mismo el que haya impulsado tanto las investigaciones en apoyo a la PGR para fincar responsabilidades contra los miembros que hayan incurrido en actos ilícitos es una prueba de la solidez, patriotismo y lealtad del Ejército mismo", apuntó.