Texas, EU.- Rodeado de sus familiares en su cumpleaños 108, el reverendo Eugene Florence sonrió el miércoles, cuando recordó la importancia de la fecha.

 

“¿Abuelo, hoy cumples 27 ó 108?'', Bromeó Yolanda Taylor, refiriéndose al 29 de febrero, que se muestra en el calendario cada cuatro años.

 

"Pensé que era 108'', dijo Florence al tiempo en que sus seres queridos se echaron a reír.

 

Florence fue un pastor en una iglesia de Fort Worth hasta hace unos 10 años. Él continuó predicando y hablando con los grupos hasta hace unos tres años, cuando también dejó de conducir y trabajar en su jardín, dijeron sus familiares.

 

Florence está en una silla de ruedas, pero se mantiene en buen estado de salud y le encanta escuchar a los juegos de béisbol y jugar al dominó, agregaron.

 

El reverendo dijo que tiene algunos secretos para vivir tanto tiempo.

 

“Me mantengo alejado del licor'', dijo con su voz suave, y agregó que él no se enoja y bebe mucha agua.

 

Taylor dijo que Florence es “un comediante” y atribuye su longevidad a su sentido del humor.

 

Su hija, Emma Evans, de 83 años, vive al lado y se preocupa por Florence cada noche. Ella dijo que siempre ha sido un buen padre y añadió que no piensa en su edad.

 

“Es sólo mi padre”', dijo Evans.

 

Florence fue pastor de una iglesia de Fort Worth hasta hace aproximadamente una década. Hasta hace varios años siguió predicando y hablando ante grupos.

 

Sus parientes dicen que le encanta escuchar juegos de beisbol en la radio y jugar al dominó.

 

En 1951, Florence hizo una maestría en el Seminario Teológico Bautista del Suroeste. Pero en ese entonces la institución educativa estaba segregada y no otorgaba maestrías a los estudiantes afroamericanos. Así que en el 2004, cuando Florence tenía 100 años, el seminario de Fort Worth le dio la maestría en teología.