México.- Alistan un paro nacional para este miércoles, 9 de octubre, sindicatos de trabajadores docentes y administrativos de 30 universidades estatales.

Así lo informó la Confederación Nacional de Trabajadores Universitarios (Contu), que agrupa a más de 90 sindicatos, incluidos muchos centros tecnológicos estatales.

De acuerdo con La Jornada, la Contu dijo que rectores de varias universidades autónomas informaron a sus trabajadores que no cuentan con dinero para salarios desde este mes.

De acuerdo con la Confederación, los trabajadores docentes y administrativos demandan: 

  • Aumento en el subsidio a la educación superior.
  • Que el gobierno federal entregue apoyos extraordinarios a nueve casas de estudio en crisis económica y que no cuentan con recursos necesarios para pagar salarios y prestaciones al personal.

Y es que aunque desde hace varias semanas la Secretaría de Educación Pública gestiona ante Hacienda la entrega de apoyos extraordinarios por 2 mil 500 millones de pesos para las 9 universidades aún no hay resultados concretos y prevalece la incertidumbre entre los empleados.

De acuerdo con el reporte de La Jornada, las instituciones en crisis son: 

  • Universidad Autónoma de Nayarit.
  • La Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.
  • La Autónoma de Zacatecas.
  • La Autónoma Benito Juárez de Oaxaca.
  • Universidades de Tabasco, Guerrero, Estado de México, Sinaloa y Chiapas.

En tanto, universidades de Baja California y Coahuila afirman que también padecen condiciones de "suma vulnerabilidad financiera".

Consultado por el mencionado rotativo, Enrique Levet, secretario general de la Contu, dijo que también exigen al Legislativo que en el Presupuesto de Egresos de la Federación 2020 se apruebe el aumento al subsidio para las universidades públicas.

Abundó que sobre todo ahora que se habla que ya no habrá examen de admisión, así como que eventualmente aumentaría la matrícula.

Abundó que la administración del presidente Andrés Manuel López Obrador busca elevar la gratuidad de la educación, aunque deja huecos en el presupuesto de las universidades que no permitirá desarrollar sus funciones sustantivas.