México.- El 5 de junio de 2018, un adolescente de 17 años de edad y su padre, ambos de origen hondureño, fueron golpeados y amenazados con ser desaparecidos por agentes federales del Instituto Nacional de Migración (INM) en la Estación Migratoria de Tlaxcala. 

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De acuerdo con la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), mientras entregaban alimentos a las personas de la Estación, un agente federal le dijo al joven que tirara una bolsa de basura pero él dijo que no, por lo que no le proporcionaron los alimentos y como protesta, su padre regresó los que él tenía, mismos que accidentalmente cayeron al piso. Luego fueron trasladados a un cuarto aislado donde fueron golpeados. 

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Refirió que ambas personas también fueron víctimas de violación a derechos humanos como la integridad personal, seguridad jurídica, al interés superior de la niñez, por lo que el organismo emitió la Recomendación 37/2019 al Comisionado del INM, Francisco Garduño Yáñez, y a la Directora General del DIF de Tlaxcala, Maday Capilla Piedras.

Ambos presentaron secuelas de tortura 

En el desarrollo de la investigación, con especialistas en medicina y psicología, la CNDH concluyó que el adolescente presentó lesiones físicas y afectaciones psicológicas concordantes con tortura y su padre tuvo secuelas psicológicas que acreditaron tratos crueles. 

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Además, el oficial de protección a la infancia asignado al joven no estuvo presente en ningún momento de los hechos, así como la ausencia de personal de la Procuraduría de Tlaxcala que se limitó a recibir comunicación sobre la situación sin realizar las gestiones necesarias. 

Por ello, la CNDH solicitó la reparación integral del daño a ambas víctimas, atención psicológica y su inscripción al Registro Nacional de Víctimas. Además de apoyar en las denuncias contras los posibles responsables de esas dependencias y capacitar a su personal sobre el interés superior de la niñez