Buenos Aires, 25 feb (EFE).- El Gobierno argentino aseguró hoy que "no amenaza" a la petrolera YPF, controlada por la española Repsol, sino que le exige el cumplimiento de las leyes en defensa de los intereses del país.

"Lo que nosotros requerimos es el correcto nivel de exploración y explotación de gas y petróleo para que el mercado esté debidamente abastecido con recursos provenientes de los yacimientos nacionales", dijo el ministro de Planificación argentino, Julio de Vido, en un comunicado.

El funcionario respondió así a lo expresado por el presidente de Repsol y de su filial YPF, el español Antonio Brufau, en la reunión de directorio celebrada en Buenos Aires el pasado jueves y a la que pretendieron acceder altos cargos del Gobierno de Cristina Fernández que no forman parte de ese cuerpo de dirección.

Según el acta de la reunión, Brufau señaló que "en el último mes YPF viene siendo objeto de algunas críticas injustas y de advertencia por parte de las autoridades nacionales y provinciales, así como de notificaciones de diferentes expedientes administrativos, incluyendo amenazas de sanciones o restricciones con dudoso fundamento legal".

"Lo único dudoso es el proceder de la gestión de Repsol en YPF, caso contrario no se entiende por qué en otras ocasiones no pusieron ningún reparo a la participación de funcionarios en las reuniones de directorio de la empresa, mientras que el jueves pasado les impidieron el ingreso, justamente cuando se presentaba el informe de producción de gas y petróleo del 2011", dijo De Vido.

El ministro consideró que para el Gobierno era "importante" que el secretario de Política Económica y viceministro de Economía, Axel Kiciloff, y el secretario de Energía, Daniel Cameron, participaran de la reunión, "teniendo en cuenta los pobres resultados de esa campaña, que de continuar obligaría al país a tener que volver a importar hidrocarburos".

De Vido señaló que esa posibilidad "implica un mayor esfuerzo fiscal, menores ingresos para las provincias y la afectación de puestos de trabajo en el sector".

"El Gobierno no amenaza. Exige el cumplimiento de las leyes y defiende los intereses de todos los argentinos", aseguró el ministro.

"Nuestras intimaciones por los incumplimientos de Repsol YPF tienen encuadre legal y están debidamente justificadas", añadió.

Recordó que las diez provincias petroleras de Argentina vienen marcando "la caída en la producción de hidrocarburos por los incumplimientos de las empresas petroleras, principalmente de Repsol YPF".

YPF aumentó sus inversiones en Argentina un 50 por ciento en 2011 hasta alcanzar el récord de 13.300 millones de pesos (3.057 millones de dólares).