México.- Andrés Manuel López Obrador, candidato por la coalición Juntos Haremos Historia para la elección presidencial del 1 de julio, ha prometido transformar el sector energético mexicano.

La propuesta del tabasqueño quien por tercera ocasión participa en la contienda electoral es transitar de la exploración y producción de crudo a la refinación, indica The Wall Street Journal.

“Los críticos afirman que podría haber consecuencias más dramáticas para la economía mexicana y las refinerías estadounidenses del golfo”, señala la nota publicada por Robbie Whelan.

De acuerdo con la Coordinadora de Morena en la Cámara de Diputados, Rocío Nahle, el proyecto de López Obrador pretende cambiar la política económica del país.

Sin embargo, para los opositores al proyecto, el plan de construcción de una a dos refinerías también implicaría consecuencias fiscales para México y un eventual déficit presupuestario.

“Para EU, quien compra la mitad de su crudo a México, podría forzar a sus refinerías a lo largo del golfo que dependen del crudo mexicano a buscar en otra parte”, indica la nota.

La política de los gobiernos en las últimas décadas ha sido la inversión de su presupuesto en la exploración y producción de crudo para la exportación y ha dedicado poca atención a actividades como la refinación.

La razón es simple, el beneficio de encontrar petróleo crudo es mayor, mientras la refinación ofrece márgenes pequeños de ganancia a cambio de una inversión masiva”, acota el artículo, mismo que cita al director en México del Instituto Woodrow Wilson, Duncan Wood.

Para Wood el cálculo de AMLO es político “quieren plantas nuevas y brillantes en la costa para que el presidente pueda pararse enfrente y decir ‘miren, nosotros lo hicimos”.

En última instancia, el plan de Andrés Manuel tendría éxito si México es capaz de producir gasolina de forma más eficiente de lo que cuesta traerla de Texas, “básicamente le estás pidiendo a México que compita con los refinadores más eficientes de crudo a nivel mundial (…) sólo por buscar la independencia energética, no estoy seguro de que el precio sea justo”, señaló el analista Pablo Medina.