Una joven residente de Seattle, Estados Unidos, redujo su pecho para evitar el acoso callejero. Se trata de Lilli Maki, quien a los 16 años ya era brutalmente acosada.

Pero dos años fueron suficientes para decir “basta”. Al cumplir 18, la joven pidió a sus padres el apoyo económico para reducirse los pechos.

La acosaban en su mayoría hombres mayores de 50 años, aún cuando era menor de edad, así que cuando quería salir debía hacerlo cubierta del pecho.

En consecuencia, cuando tenía calor y no le quedaba más opción que destaparse, se sentía cohibida y perseguida por hombres que le miraba los pechos en la vía pública.

Se somete a una cirugía para reducir sus pechos

Lilli Maki, de 18 años, no pudo más con el acoso callejero y se redujo los pechos antes de volver a soportar una mirada lasciva.

El procedimiento tuvo un costo de 10 mil dólares; 199 mil 103 pesos para evitar ser acosada. Los cirujanos le extrajeron 6 kilos de grasa del pecho.

La joven ahora se siente como una nueva persona, sin dolor en la espalda y hombros, pero sobre todo sin comentarios obscenos que soportar en la calle.

“Tener pechos enormes me convirtió en un objetivo grande para la los hombres mayores e indeseables”

Lilli Maki, 18 años.

Lilli, según cuenta, puede salir vestida con cualquier ropa, y sentirse un poco más segura, además de que ahora disfrura más hacer ejercicio tranquilamente y sin tanto peso.

Esto, porque al ser porrista necesitaba ponerse doble sostén, así que su autoestima y confianza se ha disparado desde el día de la cirugía.

No sólo fue agotador para mi físico, sino también para mis pensamientos. No podía llevar prendas que la mayoría de las mujeres de mi edad llevaban”, cuenta Lilli.