La crisis continúa en Honduras porque su Congreso Nacional desconoce resultados de las elecciones presidenciales y se abre la disputa política.

Después de un conteo del Consejo Nacional Electoral (CNE) de Honduras de este proceso electoral las denuncias por un fraude se han acrecentado, así como una injerencia de Estados Unidos en los comicios.

Acusan de un “Golpe Electoral en curso”, así como de presiones, desinformación y condicionamientos económicos ante este posible fraude que incluso ha sido denunciado por Xiomara Castro, presidenta de Honduras.

Congreso de Honduras desconoce resultados y denuncian “golpe electoral en curso” e injerencia de Estados Unidos

En un comunicado el Congreso Nacional de Honduras desconoció los resultados presidenciales tras darse a conocer una ligera ventaja al candidato conservador Nasry Asfura, favorito del presidente estadounidense Donald Trump.

Ante esta situación denunciaron la existencia de un Golpe Electoral en curso”, “materializado mediante acciones coordinadas que afectaron gravemente la integridad, transparencia y legitimidad del proceso electoral celebrado en el país”.

Además de acusar de la injerencia de Donald Trump tras sus declaraciones públicas realizadas a 72 horas de las elecciones (30 de noviembre), donde señalan que amenazó y coaccionó a los ciudadanos hondureños, alterando el libre ejercicio del sufragio.

También lo acusaron de ofrecer un indulto político al ex presidente Juan Orlando Hernández al que consideraron como “un narcotraficante condenado” como moneda de cambio electoral.

Por lo que señalaron que este indulto representa una “coacción sin precedentes contra la soberanía de un país en el mundo” y violación al derecho internacional.

También este mismo Congreso Nacional de Honduras, aseguró que “no validará un proceso manchado por presiones internas de estructuras del crimen organizado vinculadas al narcotráfico, maras como MS-13, 18 entre otras" y “mucho menos las presiones externas y por la vulneración directa de la libertad de los electores”.

Denunciaron también que el Sistema de Transmisión de Resultados Electorales Preliminares (TREP) de Honduras que no funcionó conforme a lo establecido.

Además de la eliminación o alteración del sistema biométrico que utilizan los electores de Honduras, “constituye una alteración directa de las reglas del proceso, afectando su legalidad y transparencia”.