Como dice el dicho “Aunque la mona se vista de seda, mona se queda…”

Algunas actrices aún no tienen el tacto para elegir su atuendo para desfilar por la alfombra roja de los Oscars, un evento que conjuga talento y estilo, y que también marca tendencia en el mundo entero.

Así como se premia al talento, también se califica el buen gusto de los actores a la hora de vestir, y desde luego, los peores diseños creados para esta entrega.

En primer lugar tenemos a Liza Minnelli, quien lució un traje o intento de, que no le favorece nada. El color no es el adecuado, el corte en lugar de ayudarle, pone en evidencia los kilitos extras y desde luego, el mechón de pelo no debió ser considerado como un accesorio. ¡Fatal!

En segundo lugar, Anna Kendrick y su vestido de J.Mendel tampoco se colocó en el gusto del público. Muchos espacios transparentes sin sentido ni gracia. En definitiva, su estilo no es el mejor a la hora de elegir un diseño para cualquier premio.

En tercer lugar nos pondremos el vestido de Goldie Hawn. Este vestido dorado dista mucho de las tendencias.  Puede parecer sobrio, pero definitivamente el corte no le favorece y claro, nos recuerda un poco a los vestidos que usan las mamás de las novias más que a un vestido diseñado para un evento de esta magnitud.

En cuarto lugar nos encontramos con el vestido Calista Flockhart que por el contrario del vestido de Hendrick, esconde todo. Puede que a primera vista lo adores, pero si pones atención, la actriz decidió taparse muchísimo (Afortunadamente dejó sus brazos al descubierto)

En quinto lugar nos encontramos con una mujer hermosa y que está en espera de bebé. La actriz Kerry Washington decidió utilizar un Jason Wu para este evento. El problema es que el corte no le favorece absolutamente en nada por dos razones: si no sabes que está embarazada, piensas que está gorda; pero si sabes que está embarazada, en definitiva el vestido no le hace lucir bien su barriguita.

Fotos: AFP

¿Cuál crees que falte en esta lista?