El Congreso de Veracruz dio un paso firme en la lucha contra la impunidad en casos de feminicidio y otros delitos graves, como la pederastia o la violación, pues finalmente aprobó la llamada Ley Monse, que busca impedir que familiares y parejas de agresores evadan la justicia al encubrirlos o facilitar su fuga.

Esta legislación, que había estado en la congeladora legislativa por más de tres años, finalmente obtuvo luz verde este martes con una votación mayoritaria.

La aprobación de la Ley Monse es un avance significativo para proteger a las mujeres y combatir la violencia de género en Veracruz. La propuesta original fue presentada en marzo de 2022 por la entonces diputada Anilú Ingram Vallines. Sin embargo, fue hasta ahora que logró ser aprobada con 39 votos a favor.

Esta ley honra la memoria de Montserrat Bendimes Roldán, una joven estudiante de ingeniería cuyo brutal asesinato a manos de su pareja, Marlon Botas, en 2021, evidenció la necesidad de reformar las leyes para castigar a quienes protegen a los culpables.

El asesino fue capturado en 2022 en Yucatán y se encuentra preso, pero sin una sentencia condenatoria, ya que la familia ha interpuesto varios amparos con el fin de que obtenga su libertad.

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Los padres de Botas también fueron detenidos en noviembre de 2021, pero un juez los dejó en libertad en abril del siguiente año. Poco les duró el gusto, pues fueron detenidos unas horas después, acusados de omisión de auxilio. Recordemos que fueron ellos quienes lo ayudaron a huir después de dejar a Monse gravemente herida en un hospital.

Hoy Jorge y Diana, padres del feminicida, están en libertad condicional.

Encubrir a un delincuente no es cosa menor y debido a la gravedad que esto representa esta ley ha tenido eco en otros estados del país. Paradójicamente, aunque los hechos que impulsaron esta ley ocurrieron en Veracruz, Morelos fue el primer estado en implementarla, en diciembre de 2022, marcando un precedente para que otras entidades adopten medidas similares y garanticen que los cómplices de feminicidas rindan cuentas ante la justicia.

Esta expansión nacional refleja un creciente compromiso con la erradicación de la violencia de género y la protección de las víctimas. Sancionar a quienes encubren o faciliten la fuga de agresores envía un mensaje claro: la complicidad no se tolerará, y se buscará justicia para las víctimas y sus familias.

La implementación de la Ley Monse en diversos estados es un paso crucial hacia una sociedad más justa y equitativa, donde la violencia de género se erradique y las víctimas encuentren protección y reparación.