En lo que va del actual régimen, hemos ido encontrando nuevas definiciones para mismas acciones, pero también hemos ido descubriendo una ligera línea divisoria que marca pautas muy específicas en el quehacer gubernamental de un sexenio a otro. Por ejemplo, lo que antes era corrupción, hoy lo podemos identificar como aportaciones voluntarias, lo que era desvío de recursos, hoy se puede llamar préstamo. Lo que en un sexenio neoliberal fue calificado como un montaje, hoy se muestra como criterio de oportunidad, y así, podemos seguir sorprendiéndonos con situaciones que se repiten de un sexenio a otro y que se redimen desde un púlpito con el simple hecho de que quien lo dictamina y califica es el presidente de la República.

Si hablamos de montajes, es obligado remitirnos al año 2005.

Cassez-Vallarta

El tan sonado caso Cassez-Vallarta, que fue un montaje del operativo de captura en contra de Israel Vallarta y su pareja sentimental Florence Cassez, el cual fue orquestado por el entonces director de la Agencia Federal de Investigación Genaro García Luna y encabezado por Luis Cárdenas Palomino (ambos detenidos y enfrentando respectivos procesos judiciales). Desde el momento de esa detención Israel Vallarta lleva 16 años en la cárcel por supuestamente ser líder de la banda de secuestradores Los Zodiaco y su pareja sentimental la francesa Florence Cassez, obtuvo su libertad en 2013, tras comprobar que su captura fue un telemontaje, lo que afectó el debido proceso y salió libre aún estando constatada su participación en un secuestro.

Al día de hoy, el caso sigue abierto y se siguen presentando testigos para deslindar responsabilidades, entre ellos el periodista Carlos Loret de Mola, a quien se acusa de haber estado enterado de que la transmisión televisiva que él anunciaba como una exclusiva que se llevaba en vivo, en realidad se trataba de una farsa.

La niña Paulette

Otro montaje habría sido el doloroso caso de la niña Paulette Gebara Farah, tenía cuatro años cuando desapareció de su habitación luego de que su madre la arropara para dormir en marzo de 2010. No había cerraduras forzadas ni indicios de que fuera secuestrada. La desaparición llamó la atención de todo el país. Medios de comunicación, redes sociales, espectaculares, en todos los lugares estaba la cara de Paulette. Nueve días después, fue hallada muerta en la piecera de su cama, entre el colchón y la estructura del mueble que lo sostiene, y cubierta por la sábana y colcha de la misma. La causa de muerte fue por “asfixia mecánica por sofocación”.

Nadie creyó que se tratara de un accidente y mucho menos que la niña había permanecido en ese lugar, siendo que diferentes grupos de policías investigadores habían llevado a cabo las pesquisas e incluso desde la misma cama la madre de Paulette había dado entrevistas. Para muchos se trató de un montaje para proteger a alguno de los padres de la menor, siendo que la familia era muy cercana al círculo del entonces gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto.

Frida Sofía

El 19 de septiembre de 2017, luego de que un fuerte sismo sacudiera la Ciudad de México, los medios nacionales e internacionales se volcaron en el rescate de ‘Frida Sofía’, una niña que supuestamente pedía auxilio y a la que el personal de rescate no podía llegar, pero a la que tenía localizada e incluso registraba un escáner térmico.

Almirantes de la Marina proporcionaron información en ese sentido, que fue difundida por todos los medios de comunicación que se encontraban en el lugar. Solo Televisa tuvo acceso al interior del colegio. Los enlaces de la reportera Danielle Dithurbide dieron cuenta del rescate con profusión de detalles, como que a la supuesta niña de 12 años le habían pasado una manguera para que pudiese tomar agua.

Testimonios recogidos por el periodista Porfirio Patiño, productor de Aristegui en vivo, empezaron a desmontar la patraña. El jueves 21, Carmen Aristegui entrevistó a Dorian Riva, quien ayudó como intérprete a un grupo de rescatistas alemanes. Riva aclaró que, de acuerdo con un mando de la Policía Federal, la existencia de Frida Sofía y lo relacionado con su rescate era una falsedad.(Aristegui.(AristeguiNoticias 19/sep/20).

Hace unos días, con motivo de la presentación a declarar de Carlos Loret de Mola en el caso Cassez-Vallarta, el presidente Andrés Manuel López Obrador fue muy enfático al manifestar que en su gobierno no se recurrirán a esas prácticas. Acusó que este tipo de montajes fueron muy comunes durante los 30 años del periodo neoliberal en México pero que por ningún motivo su gobierno incurrirá en dichos artilugios.

Luego entonces, cabe preguntarse, si no es una práctica similar hacer un “simulacro” -sin previa advertencia de que lo era- en lo que supuestamente fue su visita a un paciente COVID en junio del año pasado.

Por esos días, se dio a conocer que durante su gira en Cuernavaca, el Presidente López Obrador acudió al nuevo Hospital Dr. Carlos Calero en Morelos, en donde, anunciaron, se atendería a enfermos de covid de distinta gravedad, pero en una de las fotos aparecían, de manera alarmante, tanto el Ejecutivo como sus acompañantes: el gobernador del Estado, Cuauhtémoc Blanco, el Secretario de la Defensa, el General Luis Crecencio Sandoval y otro funcionarios del ISSSTE sin las medidas de seguridad como el uso de cubrebocas.

En la foto que generó la polémica aparece en cama un supuesto enfermo de covid y los funcionarios dentro de la habitación sin implementos sanitarios. Tal fue el escándalo, que más tarde funcionarios del ISSSTE tuvieron que admitir que se trató de un “simulacro”, y las personas en la imagen eran personal de la institución que se prestaron a actuar como enfermos.

La venta del avión presidencial fue una simulación y también lo fue la rifa del mismo; hasta ahora quedan muchas dudas de qué fue cierto y qué no. Si hubo tal rifa, si se entregaron los premios o si se trató todo de una simulación más.

Lo único cierto es que desde el atril de una conferencia mañanera, Andrés Manuel López Obrador “AMLO”, al puro estilo de emperador Romano, ordena, manda y determina cómo se tiene que llamar a las cosas y situaciones que se van presentando.

Así, lo hemos visto por ejemplo, redimir a sus dos hermanos pillados recibiendo bolsas con pacas de billetes de dudosa procedencia entregados en ambos casos por David León, quien fuera brazo derecho del gobernador de Chiapas, Manuel Velasco.

Pío y Martín

A los ojos de Andrés Manuel, lo que su hermano Pío recibió fueron aportaciones para el entonces recién creado Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), en tanto que a su otro hermano, Martín Jesús, simplemente le hicieron un préstamo. Para el presidente, en el caso de sus hermanos no hay delito que perseguir. Y tampoco lo hay con su prima Felipa, quien se ha beneficiado con adjudicaciones directas para sus empresas por cientos de millones de pesos, y que se configuraría como conflicto de intereses, pero para su primo no hay tal.

La suerte que habrá de correr aquel que ose desafiarlo, o el perdón que otorgará a quien a su juicio y desde su óptica es difamado, solo se determina en la mañanera; todos los días de lunes a viernes, en tanto que los miércoles está dedicado exclusivamente a los periodistas, ahí se dice: Quién es Quién en las mentiras.

Transitamos pues del montaje, al simulacro y a la simulación.

Pero quien determina cuándo es cuando, es quien ostenta el poder.

Opinión.salcosga@hotmail.com

Mi Twitter: @salvadorcosio1