El alcoholismo es una de las enfermedades mentales más constantes y predominantes en nuestro país.

Una enfermedad que no se visibiliza porque es legal... Cada vez más legal.

Y es que los adolescentes después de la pandemia han empezado a tener acercamientos con el alcohol desde muy tempranas edades, por lo tanto tienen acceso a él de manera fácil y rápida y su necesidad de tomar alcohol  es cada vez más alta .

El alcoholismo es una enfermedad que atrapa al alcohólico sin que éste se dé cuenta . A veces él sabe que quizá su manera de beber está saliéndosele de control pero no puede hacer mucho.

Intenta, una y otra vez, parar de beber y no lo logra, sin ningún éxito.  Las personas con alcoholismo creen que ellos controlan al alcohol y el alcohol los  termina controlando  a ellos.

Un claro ejemplo de cómo el alcohol puede destruir una vida de éxito y de oportunidades laborales lo vemos reflejado en uno de los personajes favoritos del reality La Casa de los Famosos: Wendy Guevara.

Wendy es una mujer que ha sabido manejar increíblemente bien sus emociones, cuenta con inteligencia emocional para no explotar, para escuchar al otro, para escucharse a sí misma , ella es paciente y tolerante, inclusiva y transparente.

No necesita pasar por encima de nadie para ganar nada, ni humilla a otro  como una estrategia para debilitarlo.

Tiene todos los atributos para ser una muy justa ganadora de 4 millones de pesos.

Pero… y ahí está el pero: tiene problemas con su forma de beber. No me atrevería como psicóloga que soy a descifrar el porqué al tomar alcohol en ella se detona la agresividad. Pero creo que tiene muchas cosas no resueltas desde su infancia que tiene que trabajar.

Siendo una mujer inteligente sabe bien quién está tratando de usarla o quién quiere manipularla para ganar votos y simpatizantes, pero no logra ponerles límites claros, sin embargo al estar ya con unos tragos encima pierde totalmente el filtro de sus emociones y explota en ira.

Tiende a guardarse las cosas y hacer como que no pasaron.

Pero cuando hacemos eso, solo tendemos a acumular resentimientos, al final esta ahí la herida.

Los demás participantes de este reality ya se han dado cuenta de la debilidad que tiene Wendy con el alcohol y viéndola tan fuerte y con tanto arrastre, les place que ella se embriague pues saben que así ella sola se perjudica, daña su imagen y la imagen de los demás.

Hay un jugador en particular que claramente ha dicho que es mejor que ella se emborrache porque así no les hace sombra.

Me parece de lo más ruin, por supuesto.

Pero hay otro participante que también es muy fuerte dentro de la casa que le ha dicho que su manera de beber no le ayuda y se pone agresiva.

¡Al menos hay alguien que ve más por la humanidad del otro y por la integridad de otra persona  que por el premio de los 4 millones de pesos!

Al punto que quiero llegar es que este reality es un ejemplo para los jóvenes que lo están viendo: Puedes tenerlo todo para ganar, pero si el alcohol te atrapa y tu manera de beber te lleva a estados alterados y agresivos, todo lo bueno que hayas hecho se va por la borda.

El programa es para mayores de edad por supuesto, pero es inevitable que ya esté  teniendo un impacto en menores de edad.

Los padres podemos darle compañía y guía  a nuestros hijos si es que sabemos que lo ven o que siguen la trama por TikTok, explicándoles de las repercusiones de la ingesta del alcohol.

Es un aprendizaje para jóvenes y adultos.

Yo espero que Wendy tenga la suficiente capacidad de inteligencia emocional para controlar su forma de beber lo que le reste de estar en ese concurso.

Cada viernes les dan de tomar y pareciera que les permiten tomar de más cantidad, cada vez más porque entonces el borracho es el que entretiene, el que divierte, y entonces nos parece más entretenido ver a alguien tomado aun cuando esté batallando con el demonio que es el alcohol.

Personalmente yo que soy seguidora de La Casa de Los Famosos no me gusta ver sus fiestas los viernes porque se que a través del alcohol es como juegan con sus emociones, generando más raiting entre más borrachos se encuentren.

Ahí lo dejo para la reflexión. También a qué clase de programas hacemos exitosos, a costa del sufrimiento emocional de otro? Es digno de análisis para mí en lo personal.

¿Cuánto puede costarte una mala copa?

¿Quiénes son de los que te rodeas que se alegran verte mal cuando tomas?

A pesar de que estos programas o reality’s puedan verse como sin sentido y sin fondo, en realidad si le escarbas puedes encontrar muchos aprendizajes.

Eso es lo que opino. ¿Tú qué piensas?

Es cuanto.