Sonora Power
No deja de tener lecturas y proyecciones interesantes por su posible impacto en el ámbito político nacional el ascenso de la imagen y aceptación de la figura política del gobernador de Sonora, Alfonso Durazo Montaño, justo al concluir su cuarto año de gobierno.
Esto en un contexto en el que muchos de los altos perfiles de la cuarta transformación se han venido resbalando y le han fallado a la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y por tanto a la proclamada 4T, por sus frivolidades, sus errores de cálculo y aún por sus aspiraciones y ambiciones de poder.
Ha sido público notorio el rechazo manifiesto de parte de los ciudadanos de a pie a las conductas de personajes como Adán Augusto López Hernández, Gerardo Fernández Noroña, Ricardo Monreal, Mario Delgado, Andrés Manuel López Beltrán y otros menos notorios, pero no por eso menos escandalosos.
Por ejemplo está el caso del diputado federal Sergio Gutierrez Luna y su esposa (también legisladora federal) Diana Karina Barreras, que además son exhibidos de manera cotidiana por su extravagante estilo de vida, o bien del caso de Andrea Chávez.
Digamos que ninguno de ellos le está ayudando a la presidenta Sheinbaum ni a la causa política que ella encabeza.
La misma presidenta señaló que para ella la visión de la austeridad republicana es lo que debe prevalecer como rasgo de la 4T y que encima de ello el concepto de que no puede haber gobierno rico —y por ende tampoco gobernantes ricos— con pueblo pobre, debe ser la marca de la casa.
Equivocarse de la manera en que los personajes ya mencionados lo han hecho, con viajes, lujos, joyas, excesos, abusos al ciudadano, actos anticipados de campaña y demás actitudes que van en contra de los postulados del movimiento de transformación nacional, evidentemente tiene un alto costo político, tanto para el gobierno de Sheinbaum, como para los responsables.
Y justo en ese agitado mar, aparece la figura del actual presidente del Consejo Político Nacional de Morena, gobernador de Sonora, que además es una figura política de sólida y larga trayectoria, con conocimiento y entendimiento profundo de cómo y para qué se hace política y con la capacidad de moverse en el escenario estatal promoviendo y alcanzando el desarrollo y mejora en la calidad de vida del estado que gobierna y al mismo tiempo con presencia en el escenario político nacional.
Se dice fácil, pero lo que Alfonso Durazo Montaño logra con su manera personal de actuar y ejercer el poder es digno de análisis.
Al gobernador no lo mueve la vanidad ni la ambición de poder, para Alfonso Durazo, que cumplió 71 años el pasado 11 de julio la idea de irse de vacaciones a Madrid o a Tokio no es algo que le plantee una tentación en lo particular, para él un lujo verdadero es ir a pasarse un fin de semana en su natal Bavispe, en la alta sierra de Sonora.
Su compromiso con la causa que le trajo a encabezar el gobierno de Sonora en 2021, va más allá de toda aspiración o comportamiento egoísta e incluso en su momento decidió renunciar a su posición como el muy poderoso secretario de Seguridad Pública y Protección Ciudadana del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, para cumplir con su aspiración de gobernar Sonora, una posición a la que llegó casi 30 años después del momento en que le era natural como efecto colateral del asesinato de Luis Donaldo Colosio.
Alfonso Durazo como se sabe ha tenido una trayectoria muy cercana al poder y a los momentos relevantes en la vida nacional de los recientes 45 años, de origen humilde supo llegar y escalar en la estructura de poder y aunque las circunstancias le hicieron volver a empezar más de una vez, ha tenido la capacidad de reinventarse e insertarse otra vez en la posición que le corresponde como actor político de primera línea.
Uno de sus grandes aciertos fue acercarse y colaborar con López Obrador y construir con él, lo que hoy conocemos como Morena.
Durazo creyó en el proyecto y se vino a Sonora para construirlo, en el 2015 junto a Javier Lamarque Cano y otros soñadores, se lanzó al abismo para ser derrotado en ese proceso electoral.
Sin embargo la experiencia sirvió de caldo de cultivo y 3 años después logró lo inusitado al triunfar en la elección presidencial y él mismo ser electo senador de mayoría por Sonora, algo que en el pasado jamás soñaron las fuerzas de izquierda, se hizo en solo 3 años.
Antes de las elecciones del 2018, en una entrevista Durazo me dijo que el movimiento del que muchos dudaban y no pocos se reían, triunfaría en Sonora, porque no era algo efímero y no era solamente crecer en torno a una figura.
Desde entonces me anticipó que Morena ganaría la gubernatura en el 2021 y que mandaría al PRI (que entonces era gobierno en Sonora 2015-2021) con Claudia Pavlovich y al PAN, que antecedió de 2009 al 2015, con Guillermo Padrés, al basurero de la historia, y lo cumplió.
Confieso que en esa ocasión yo como periodista-entrevistador, miraba incrédulo a Durazo, pero 3 años después la historia me demostró que tenía razón.
Hoy a 4 años y algunos meses de su triunfo resonante Alfonso Durazo vuelve a sorprender a propios y extraños al convertirse según los recientes estudios de opinión en el gobernador mejor evaluado del país.
De acuerdo con Demoscopia Digital en su levantamiento de opinión sobre los gobernadores, Alfonso Durazo rebasó por la izquierda a la panista Tere Jimenez de Aguascalientes y a muchos otros de sus correligionarios, para ubicarse con un 69.2% de aceptación entre sus gobernados.
Durazo por cierto está próximo a rendir su cuarto informe de gobierno y de ahí pasar a la parte quizás más delicada de su gestión, que es la de elegir un sucesor que su proyecto de gobierno siga adelante, plan en el que que todos sus antecesores han fallado, excepción hecha de lo que lograron en su momento Alejandro Carrillo Marcor y Samuel Ocaña en el ya lejano 1979.
Desde ya corren las apuestas a que lo logrará, la gran duda es quién será ese sucesor que consolide a la 4T en Sonora.
Si lo consigue, mucho se habla de que el gobernador sonorense podrá ser considerado para misiones mucho muy importantes en la segunda mitad del sexenio de la presidenta Sheinbaum.
Hoy los números hablan por sí solos.
Correspondencia a demiandu1@me.com | X: @Demiandu