México.- ¿Cuánto tiempo tarda una familia en recuperarse de la muerte de uno de sus integrantes? Mucho, seguro. Y si esta muerte ha sido de forma cruel como la de Julio César Mondragón Fontes, entonces la recuperación quizas nuca llegue porque el duelo es acompañado de coraje y del sentimiento de impunidad. 

Impunidad es precisamente de lo que adolecen los familiares del normalista que fue ejecutado extrajudicialmente, torturado y desollado entre el 26 y 27 de septiembre de 2014 en Iguala, Guerrero. 

Cuitláhuac y Lenin Mondragón asistieron a la décima Conferencia latinoamericana de crítica jurídica por la memoria y contra el olvido, que se llevó a cabo este jueves en el Centro de Investigaciones Interdisciplinarias en Ciencias y Humanidades de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). 

Ahí dijeron que a 7 meses de los hechos contra los estudiantes de la Normal Rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, ?la impunidad es la principal ganadora?. 

Y es que criticaron que el asesinato de Julio César no fue atraído por la Procuraduría General de la República (PGR), porque las autoridades de Guerrero no han llevado a cabo una ?investigación científica? para encontrar y sancionar a los responsables. 

?Se trató de una ejecución extrajudicial que incluyó tortura, pues fue desollado vivo. En este caso no se aplica el estado de derecho?, consideraron ante académicos y estudiantes universitarios. 

Según lo relata La Jornada, agregaron que el crimen cometido en Iguala, el cual dejó 6 muertos, 17 heridos y 43 estudiantes desaparecidos, también se encuentra en la impunidad. 

?Hay muestras claras de poca voluntad política. El Gobierno de Enrique Peña Nieto ha intentado, a través de una campaña mediática, hacer creer al país y al mundo que ya se hizo lo necesario y que los familiares somos unos necios. Peña Nieto dice que en México no hay tortura, pero ¿qué calificativo puede dar a lo que le hicieron a nuestro familiar??, cuestionaron. 

Así, exigieron a las autoridades justicia por el crimen contra los normalistas, castigo a los responsables materiales e intelectuales, reparación del daño a las familias con base en estándares internacionales, que haya garantías de no repetición de hechos similares. 

Asimismo, que se abran nuevas líneas de investigación y reconozcan la desaparición forzada de los 43 normalistas, la ejecución extrajudicial de otras seis personas, entre ellas Julio César, así como que este último fue torturado. 

En su nota, Emir Olivares Alonso destaca que los familiares consideraron que al luchar por un gobierno que actúe con ética, sabiduría y justicia, ?la muerte de Julio César ?quien era padre de una bebé? tendrá un sentido?. 

Y aunque se reunieron los familiares de los normalistas con el mandatario federal en Los Pinos, el titular del Ejecutivo y su equipo se comprometieron a que antes de dar cualquier información o avance del caso ante medios se les haría saber a los padres de las víctimas, lo cual no se cumplió, lamentaron.