México.- La empresa Platinum Casket Company, ubicada en el municipio de La Paz, Estado de México, fabrica ataúdes especiales para atender las muertes por el Covid-19.

La producción de féretros de la firma había caído hasta en 90 por ciento por las restricciones sanitarias para la velación e inhumación de cuerpos, surgida a raíz del nuevo coronavirus.

Y es que la demanda de los crematorios en las funerarias aumentó pues por protocolo saliendo el cuerpo del hospital donde falleció por el virus debía cremarse.

No obstante, la firma se renovó y reinventó la producción de ataúdes que son cien por ciento herméticos y cumplen con las nuevas disposiciones higiénicas.

La Secretaría de Salud reportó este miércoles 20 de mayo el número más alto, en un periodo de 24 horas, de muertes por Covid-19: entre el martes y ayer se registraron 424 defunciones por la enfermedad.

“Estuvimos a nada de cerrar porque se puso horrible”

Eduardo López Ignacio, encargado de la empresa Platinum Casket Company, relató a La Jornada los momentos de incertidumbre por los que pasaron ante las nuevas disposiciones en cuanto a la velación e inhumación de cuerpos por el Covid-19.

“Estuvimos a nada de cerrar porque se puso horrible”, cuando se dio la orden de incinerar, no velar y emplayar cuerpos e incluso ataúdes, en casos confirmados, sospechosos y de a todas aquellas personas que han fallecido por problemas respiratorios, recordó.

Contó que no cerró la fábrica ubicada en la colonia Hank González, porque durante la Emergencia Sanitaria estuvieron vigentes los pedidos de exportación a Estados Unidos y Puerta Rico.

Además, señaló al corresponsal René Ramón, contaban con material y acero almacenado para continuar la producción.

Agregó que Platinum Casket Company es la única empresa que fabrica ataúdes a nivel industrial y como hacen féretros para el envío de cadáveres a cualquier parte del mundo, decidieron utilizar la tecnología y la experiencia, para ahora fabricar cajas para coronavirus.

Accesible costo del féretro

Eduardo López Ignacio, encargado de la empresa Platinum Casket Company, detalló a La Jornada las características del nuevo ataúd que atiende las muertes por el Covid-19.

“Es un ataúd que nadie lo fabrica en México, como nosotros. Es totalmente diferente a lo común", destacó López Ignacio quien explicó que los féretros están hechos de una sola pieza, en tanto que por dentro todo está soldado y a la cápsula metálica adicionalmente se le sella con tres capas de polietileno, que evita la fuga de líquidos, vapores y propiamente el coronavirus.

Agregó que se realizaron pruebas de resistencia de aguante de líquidos "y no hay filtraciones porque el ataúd como tal, ya terminado, lleva tres capas de polietileno pegados al casco y tiene una goma de sellado. No va a emanar nada al exterior, ni siquiera vapores".

De acuerdo con López Ignacio, el costo del féretro sigue siendo accesible, por lo que una persona que murió por Covid-19 puede sepultársele si así lo desea la familia que rechaza la incineración.