Con un enfoque en la inclusión y el fortalecimiento comunitario, Grupo Salinas llevó a cabo el pasado 31 de agosto de 2025 una jornada cultural y de servicios en la explanada municipal de Chimalhuacán.

El evento, en el que participaron empresas como Elektra, Banco Azteca e Italika, reunió a cientos de familias y se convirtió en un espacio de encuentro que combinó tradición, cultura y soluciones prácticas para la vida diaria.

El encuentro no solo fue una muestra del compromiso social de Grupo Salinas, sino también un reflejo del liderazgo de Ninfa Salinas Sada, presidenta del Comité de Operadores de la compañía, quien ha impulsado esta estrategia de cercanía con la comunidad en distintas regiones del país.

Cultura y prosperidad en un mismo espacio

Durante la jornada, los asistentes encontraron stands de Elektra y Banco Azteca, donde se ofreció asesoría para créditos, apertura de cuentas y orientación financiera.

Italika atrajo a jóvenes y comerciantes con una escuela de manejo y actividades diseñadas para fomentar la movilidad responsable, mientras que Total Play, Tiendas Neto y Más Salud acercaron soluciones en conectividad, consumo y bienestar.

La iniciativa respondió a una visión clara: vincular el quehacer empresarial con el desarrollo de las comunidades.

Francisco Rojas, director del Territorio Metro Oriente de la Red de Grupo Elektra, lo resumió al afirmar que la prosperidad “no solo se mide en préstamos y pagos, sino en la riqueza de nuestra gente y nuestras tradiciones”.

Identidad local con proyección nacional

Uno de los momentos más esperados del evento fue la presentación de la Comparsa Jaguares de Chimalhuacán, un grupo de danza tradicional que, gracias al patrocinio de Banco Azteca, representará al Estado de México en el Festival Nacional de Máscaras Danzantes, a celebrarse en noviembre en Coscomatepec, Veracruz.

La participación de esta comparsa no solo fortalece la identidad cultural local, sino que coloca a Chimalhuacán en un escaparate nacional que reunirá a más de mil 500 danzantes, 300 músicos y 80 maestros mascareros.

Un modelo de liderazgo

De acuerdo con Nayeli Montaño, representante del Comité de Operadores del Estado de México, el esfuerzo detrás de estas jornadas refleja la convicción de que “la libertad y el poder de organizarnos son herramientas que transforman comunidades”.

El papel de Ninfa Salinas resulta central en esta visión. Bajo su liderazgo, Grupo Salinas ha buscado que sus marcas no solo funcionen como proveedores de bienes y servicios, sino como catalizadores de desarrollo comunitario.

Su impulso a este tipo de iniciativas permite que proyectos empresariales se conviertan en espacios donde cultura, inclusión y crecimiento económico se entrelazan.

Más allá de la lógica comercial

Lejos de limitarse a un evento promocional, la jornada en Chimalhuacán se consolidó como un ejercicio de responsabilidad social.

Las familias no solo recibieron asesoría financiera o acceso a servicios, sino que también participaron de un entorno que celebró la identidad cultural y fomentó la construcción de lazos colectivos.

En este sentido, la estrategia encabezada por Ninfa Salinas representa un modelo que combina lo empresarial con lo social, y que da un lugar protagónico a comunidades como Chimalhuacán, que encuentran en estas actividades una plataforma de visibilidad y fortalecimiento local.