Y como lo prometido es deuda, en este espacio daremos seguimiento en esta ocasión, al pernicioso y deplorable caso del siniestro personaje de la política morelense: Rafael Reyes Reyes (alias Rafa Reyes); enquistado para desgracia del régimen de Margarita González Saravia, en el Congreso legislativo morelense como coordinador parlamentario de Morena, el mismo partido de la gobernadora.
Sí, es Rafa Reyes Reyes, quien creció políticamente a la sombra del originalmente priista y legendario Juan Salgado Brito (JSB), a quien traicionó.
La historia refiere que el hoy flamante legislador, siempre siguió al hoy desaparecido Juanito Salgado a donde quiera que este iba, mientras le convenía, pero la rectitud de Salgado Brito, nunca encajó con lo “torcido” de Reyes Reyes.
Han sido varias las ocasiones recientes, en que, Rafa Reyes ha gemido su falsa orfandad respecto de JSB, reconociendo que él nació políticamente en el PRI.
Cabe recordar que cuando Rafa contendió por vez primera buscando la presidencia municipal de Jiutepec, lo hizo bajo las siglas del Revolucionario Institucional, en cuya aspiración fracasó.
El tiempo fue haciendo su trabajo y las circunstancias se modificaron indefectiblemente, haciendo que las necesidades materiales y humanas del político Rafael Reyes y sus dependientes familiares, se manifestaran implacablemente.
Así entonces, tuvo que “tragarse su orgullo” y admitir su “degradación” política como una salida a su urgencia económica, por lo que en esa nueva administración fungió como secretario municipal del entonces alcalde Rabindranath Salazar Solorio y se mantuvo en ese mismo cargo con Miguel Ángel Rabadán, cuando este ganó la Presidencia Municipal de Jiutepec.
Así, el sueño de Rafa Reyes de ser presidente municipal de Jiutepec solo se consolidó al ser postulado por Morena, por supuesto, con el apoyo de Juan Salgado Brito, quien fue amigo personal de AMLO.
Con muchas dificultades logró ser postulado nuevamente por el partido de la 4T para el mismo cargo y hasta fue reelecto, presidiendo el Ayuntamiento de Jiutepec, por un periodo más.
Se afirma que, en este segundo ejercicio, fue más evidente el nocivo acompañamiento de su cuñado David Ortiz, de quien se dice que fueron públicos y notorios sus malos manejos en la administración municipal, ya que intervino descaradamente en la asignación de contratos de adquisiciones de bienes y servicios.
Rafa Reyes pretendió después que su cuñado le sucediera en la Presidencia Municipal en la elección del 2024, pero aquel siempre fue una persona déspota y altanera; atributos bien conocidos por la población civil de Jiutepec y eso seguramente ha influido para que Ortiz no haya llegado a ese cargo por la vía de la elección solo sustituyó a su cuñado Rafa algunos meses, cuando este tuvo que renunciar a la alcaldía para competir para su actual cargo de diputado local por el sexto distrito.
Además de todas estas “perlas noticiosas”, a don David Ortiz, hay quienes lo señalan por contar con relaciones criminales, incluso a él mismo hay quienes lo ubican como un “mañoso”, pues asume conductas poco ortodoxas a la tradición legal.
Rumor o verdad, pero en una asombrosa pero real aseveración del dominio público en el estado de Morelos, a David Ortiz se le vincula con el asesinato del activista Isaac Herrera “El Pinpen”, por ende a Reyes Reyes también, por la relación tan íntima y jerárquica que los une.
A “El Pinpen” lo asesinaron en su domicilio, ya que se había dado a la tarea de investigar y probar los malos manejos administrativos del entonces presidente municipal y la responsabilidad del cuñado incómodo; teniendo documentados todos los malos manejos de los cuñados Rafa y David.
Una auténtica escena de película de gángsters, como la escena cuando mafiosos de un mismo cártel ejecutan en su propio domicilio y asistidos con todas las formalidades del caso, al soplón que le permitió escapar a John Wick, en la última película de la saga.
En eso se ha convertido ya Morelos, al igual que otras entidades: en un impresionante escenario de ejecuciones y atentados a la dignidad como a la integridad humanas.
También se sabe, entre otros malos manejos, del ejercicio arbitrario de autoridad en el municipio de Jiutepec, en casos como el cierre de un Club Hípico, en el Fraccionamiento San José Sumiya, el cual fue clausurado por puro capricho, bajo el argumento de que no contaba con licencia de funcionamiento, siendo que esta había sido solicitada oportuna, pero “injustificadamente” nunca obtuvo una respuesta formal; en estos casos la ley también se interpreta. Y aquí y en China, la nula formalidad para responder de toda autoridad, se interpreta como una “afirmativa ficta”.
La realidad del caso es que, después de muchas gestiones y mucha espera, el empresario tramitó y obtuvo la licencia de uso de suelo, con un costo exorbitante, por lo que reclamó su nulidad ante el Tribunal de Justicia Administrativa, quien le dio la razón al empresario y le ordenó al municipio (gobernado por el siniestro personaje, Rafa Reyes) que devolviera el costo de la licencia de uso de suelo, lo cual le cayó como “patada de mula”.
Y para desquitarse, Reyes, maliciosamente retrasó el trámite de la licencia de funcionamiento para que, al realizar la inspección y al no contar con la licencia de funcionamiento, se procediera a la clausura, lo cual efectivamente ocurrió.
Todo un caso de tráfico del poder el de RRR.
De esa manera queda probado su actuar caprichoso, con el cual “el triple erre” afectó inversiones en el municipio de Jiutepec y la generación de fuentes de empleo, entre otras afectaciones.
Reyes y su cuñado son totalmente perniciosos; así lo demostraron durante la administración municipal, manejando a su antojo y para fines perversos a la policía municipal, contando con señalamientos de acoso sexual ambos cuñados.
Y como colofón, y por si fuera considerada poca su acción nociva para la población de Jiutepec, RRR y su cuñado David, durante los seis años que estuvieron al frente de ese municipio, tuvieron como caja chica el Sistema de Conservación de Agua Potable y Saneamiento de Jiutepec, del cual -se comenta- obtuvieron decenas de millones de pesos, simulando ejecución de obra pública y prestaciones de servicios.
Por eso los analistas de este país y del mundo entero, ven en Morena a un inmenso y generoso depósito de “cuadros chatarra” de la política mexicana, los cuales no todos pueden ser reciclables, para desgracia de esta misma sociedad mexicana, tan ávida de profesionales y gente seria y honrada al frente de las instancias de autoridad.
El caso del legislador local Rafa Reyes y su cuñado David Ortiz, solo nos confirma que el nuevo PRI, construido con los cuadros más corruptos y malintencionados del viejo partido tricolor, está en Morena.
Ese partido está plagado de priistas de la peor composición y origen. Ojalá que no le vayan a afectar en su gestión y en su imagen a la señora gobernadora.
¡Despierte señora gobernadora! Quítese la venda de sus ojos y ponga “orden en la granja”. Es por su bien y por el bien del Estado de Morelos que usted gobierna.
Usted está llamada a ser la gobernadora que limpiará la administración tan deplorable que le heredó Cuauhtémoc Blanco con sus enjuagues y torpezas, derivados de su nula formación política y de su inexperiencia como servidor público, no obstante haber sido presidente municipal de Cuernavaca, posición que le pasó de noche.
Héctor Calderón Hallal: @pequenialdo; @CalderonHallal1



