Si los destinos de los pueblos no estuvieran en juego, el escenario que estamos viviendo con Estados Unidos sería mucho más interesante de analizar y menos preocupante. Sin embargo, la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo ha sabido sortear las ocurrencias de Donald Trump. Pienso que esta vez no será la excepción.
La mandataria mexicana se reunirá con su homólogo americano en la edición 51ª Cumbre del G7 en Kananaskis, Canadá.
La política bilateral será definitivamente el eje en un evento que debería acaparar acuerdos conjuntos.
La reunión sería en suelo neutral. Estados Unidos “grita” fuerte, pero México tiene calma y también muchas interrogantes que no han recibido respuesta de los gringos. El tráfico ilícito de armas que ingresan por la frontera norte. El malentendido y polémico mensaje acusando al gobierno de México de ser el hostigador de las manifestaciones en Los Ángeles. Los acuerdos y protección para delincuentes que ellos mismos denominaron “terroristas”; etc.
Esta sería la primera vez que se reunirían Sheinbaum y Trump, luego de sus respectivas tomas de protesta.
En la Cumbre del G7 participarán jefes de Estado y de gobierno de las siete economías más industrializadas a nivel global: Canadá, Estados Unidos, Francia, Italia, Japón, Alemania y el Reino Unido. Será la próxima semana cuando la presidenta mexicana y su comitiva salgan. Los días 16 y 17 de junio tendrán de todo en materia internacional.
Los conservadores, esa “oposición trasnochada” apuestan a que los Estados Unidos de América invada México. Lo desean con todas sus fuerzas. Lo cierto es que el mandatario americano, siempre ha dado “una de cal y otra de arena”, como dicen en mi rancho. La capacidad de Sheinbaum, su cabeza fría y el dialogo por delante han dado resultados, como las pausas en los aranceles. Esta vez, las negociaciones respecto al impuesto al acero y también a las remesas estarán sobre la mesa de acuerdos. En este foro político, estarán presentes potencias que han mostrado su apoyo en todo momento a México.
Seguramente la presidenta sabrá responder a su respaldo. Además de las potencias internacionales, estarán como países invitados Brasil e India.
Cara a cara, Sheinbaum y Trump podrán acordar y discernir, pero nunca habrá sometimiento.
Hoy y siempre toca a todos los mexicanos estar unidos. Nunca ha sido positivo dividir ante algo más grande que intente provocar o intervenir a México. Es momento en que partidos y sociedad civil demuestren de que están hechos. Y dejen de creer en la propaganda amarillista que solo busca desacreditar y beneficiar a unos cuantos.
X: @vanessafelixmx