Toronto (Canadá), 27 feb (EFE).- El primer ministro canadiense, Stephen Harper, negó hoy que el Partido Conservador esté vinculado con un intento de fraude electoral a gran escala que se produjo durante las últimas elecciones generales de 2011.

Harper rechazó de forma repetida en el Parlamento canadiense tener cualquier conocimiento o información sobre el origen de las llamadas telefónicas que durante las elecciones de mayo del año pasado dirigieron a los electores de partidos de la oposición a centros de votación inexistentes.

"No tenemos ninguna información", dijo Harper ante las preguntas de los partidos de la oposición.

"Si ellos tienen cualquier tipo de información (sobre el origen del fraude) les desafío a que la presenten, si es que existe", añadió el primer ministro canadiense.

Harper y otros destacados miembros del Partido Conservador hicieron caso omiso a las preguntas y acusaciones de la oposición a pesar de que Elecciones Canadá, el organismo estatal encargado de verificar los procesos electorales, ha iniciado una investigación contra el partido.

El primer ministro canadiense también hizo oídos sordos a la petición de crear una comisión investigadora "sobre el peor fraude electoral de la historia de Canadá", según lo calificó la oposición, o convocar elecciones parciales en aquellas circunscripciones afectadas por el fraude.

Según las informaciones aparecidas en medios locales, votantes en alrededor de 36 de las 308 circunscripciones electorales del país recibieron el 2 de mayo de 2011, el día de las elecciones generales, falsas llamadas telefónicas en nombre de Elecciones Canadá en las que se les informaba de cambios en sus centros de votación.

Pero en las nuevas direcciones facilitadas telefónicamente no había centros de votación y se teme que muchas personas, en su mayoría identificados como votantes de partidos de la oposición, no pudieron depositar su voto.

El periódico Ottawa Citizen dijo que Elecciones Canadá ha vinculado las falsas llamadas con la compañía RackNine, una firma que ofrece llamadas automatizadas y que en los pasados comicios fue contratada por varios candidatos del Partido Conservador, entre ellos el primer ministro, Stephen Harper.

RackNine señaló que no tiene conocimiento de las llamadas fraudulentas y apuntó a que alguien no relacionado con la compañía utilizó sus servidores para intentar suprimir el voto hacia los partidos de la oposición.

Sin embargo, los partidos de la oposición han señalado que es la tercera vez que el Partido Conservador ha estado involucrado con irregularidades electorales.

En noviembre de 2011, el Partido Conservador se declaró culpable de violar las leyes electorales en las elecciones de 2006, las primeras ganadas por Harper, al sobrepasar el límite permitido de gasto en anuncios electorales.

Además, hace escasas semanas, los conservadores se vieron forzados a reconocer que habían estado realizando llamadas a la circunscripción de un diputado liberal en las que falsamente indicaban que su representante en el Parlamento estaba a punto de dimitir.