México, 24 Feb. (Notimex).- Las reformas a la Ley de Competencia Económica de 2011 y la puesta en marcha de la nueva Ley de Asociaciones Público-Privadas (APP), ?son un paso importante en la dirección correcta? para el desarrollo del país, aseguró el secretario general de la OCDE, José Angel Gurría.

Aseveró que las reformas de mercado en proceso de operación en el país podrían tener un impacto de hasta uno por ciento anual en el crecimiento económico y dijo que mientras en México se generan empleos durante la crisis económica mundial, en el resto de las naciones que integran el organismo se perdieron 14 millones de puestos de trabajo.

Durante la presentación mundial del estudio ?Apuesta por el crecimiento? el titular de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) recordó que además de las reformas que hoy están en proceso de operación, también se implementaron cambios estructurales desde el año 2008 en sectores como la educación, en donde el sistema de selección de docentes es más estricto y eficaz.

El ex funcionario mexicano dijo que aunque el país mantiene una sólida posición económica y estabilidad financiera, debe esforzarse más y realizar las reformas estructurales pendientes, pues sólo con ello se mantiene el dinamismo, la confianza y la visión de mediano plazo.

La necesidad de aplicar reformas es una prioridad para todas las naciones del mundo, sin importar aspectos políticos ni procesos electorales que pudieran obstaculizar su concreción, apuntó.

Gurría resaltó además que la crisis internacional ha tenido un enorme costo en el mundo, pues hoy existen unos 200 millones de desempleados y en el caso de los países de la OCDE hay alrededor de 45 millones de personas sin empleo, es decir 14 millones más que antes de la crisis.

Especificó que la mitad de estos nuevos desempleados los arrojó Estados Unidos y la otra mitad el resto de las naciones, mientras que ?México ha estado creando empleos en ese periodo?.

Comentó que el desempleo promedio en el mundo es de entre 8.5 y 9.0 por ciento, pero en los jóvenes asciende al 20 por ciento, por lo que se trata de una crisis que impactó en jóvenes, hombres y personas con poca preparación.

En este sentido, el secretario general de la OCDE alertó y dijo que ?estamos en peligro de que haya una generación perdida? porque son jóvenes a quienes se les dijo que si se preparaban mejor, les iría mejor.

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