Terminaron los foros del Parlamento Abierto sobre la jornada laboral de 40 horas semanales en México; en su última sesión, se sugirió que dicha iniciativa no aplique para trabajadores que realizan home office.

En el quinto foro del Parlamento Abierto sobre la reducción de la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales, se abordaron algunas propuestas para que la implementación del dictamen no afecte al país.

Ello luego de que los representantes del sector empresarial señalaron como principales trabas a la reforma las consecuencias en niveles de productividad y costos, así como la falta de empleados para cubrir vacantes.

En ese sentido, se señaló que la jornada laboral de 40 horas puede o no ser aplicable para algunos casos, como el de las personas que trabajan en home office.

¿Trabajadores con home office no entran a reducción de jornada laboral de 40 horas?

El abogado Francisco Javier Peniche respondió a los cuestionamientos de incertidumbre que expresaron algunos de los ponentes durante el quinto foro del Parlamento Abierto de la jornada laboral de 40 horas.

Ello luego de que se señaló que la reducción de la jornada laboral podría tener consecuencias negativas en materia de costos, precarización del salario, reducción de la productividad en México, así como otros temas que podrían representar una amenaza para la economía mexicana.

En ese sentido, el abogado Francisco J. Peniche expuso que el motivo de los foros es realizar diálogo social para establecer una reforma responsable, que cumpla con el objetivo de otorgar descanso a los trabajadores y reducir la informalidad en el país.

De manera que, según dijo, en algunas posiciones la reducción de la jornada pudiera o no aplicarles a los trabajadores, como en los casos de las personas que realizan home office.

“Hace poco se aplico la reforma de teletrabajo, por qué no pensar que a la gente que teletrabaja pudieran no necesariamente aplicarle una jornada reducida”, señaló el ponente, quien indicó que este grupo de personas no está inmersa dentro de los que pasan horas de su día trasladándose a sus trabajos.

Igualmente, Francisco Javier Peniche señaló que otra opción para no perjudicar la economía del país y de los trabajadores, es el hacer una reducción gradual a la jornada laboral, según lo expone el artículo 116 de la OIT, y el que los empleadores, finalmente, ejerzan su responsabilidad de brindar capacitación adecuada a los empleados para mejorar la productividad.

No quieren incertidumbre en establecimiento de jornada laboral de 40 horas

Pese a su señalamiento, otros de los participantes en el último foro del Parlamento Abierto de la jornada laboral de 40 horas a la semana, o dos días de descanso, expusieron que el tener incertidumbre sobre la reforma es su principal objeción.

José Reynol Neyra González, representante sindical de la Confederación Autónoma de Trabajadores y Empleados de México (CATEM), expuso que actualmente no hay certeza de que la reforma pueda prosperar sin generar afectaciones.

El representante sindical consideró que se necesita certidumbre sobre lo que plantea con exactitud la reforma, incluyendo el cómo y en qué casos se aplicaría, por lo que solicitó que el gobierno federal se pronuncie sobre el caso, pues en su esquema tiene más de un millón de trabajadores.

Asimismo, Neyra González destacó que en los diálogos los trabajadores no han exigido una reducción a su jornada laboral, sino que se centran en “hacer prosperar las prestaciones económicas de todos”.

“Es prioridad elevar los niveles de percepción de los trabajadores para que alcance para lo elemental”, señaló el ponente, quien dijo que de momento y en estos términos, su organización no está a favor de la aprobación de la reforma.

Igualmente, Álvaro Alejandro García Parga, especialista en Relaciones Laborales y directivo de la Concamin, subrayó que para aprobar la reforma se debe tener certidumbre sobre cómo se realizará, los sectores que pueden amortiguar los impactos de ella y los que no.

El representante de Concamin expuso con la iniciativa se reduce la capacidad de producción hasta 17%, por lo que también se debe saber cómo se va a “amortuguar ese golpe” previo a la aprobación de la reforma.