Richard Huckle, apodado el "peor pedófilo del Reino Unido", fue violado y asesinado por otro recluso mientras cumplía condena en una cárcel de máxima seguridad de Wakefield, según se aseguró durante el juicio celebrado el 18 de noviembre.

El asesinato de Richard Huckle se produjo en 2019, pero recién se confirma que fue torturado por Paul Fitzgerald, quien para hacer justicia por su propia cuenta, no sólo lo apuñaló, sino que también lo violó, le metió un bolígrafo en la nariz hasta tocar al cerebro y lo estranguló con cable eléctrico.

"Es un hombre que viola y abusa de niños para divertirse. Podría haberlos matado también. Me inclino a pensar que hizo algo peor que sólo violarlos. Esto es justicia poética, quería que sintiera el sabor de lo que le hizo a sus víctimas", declaró Fitzgerald, quien confesó que además tuvo intención de matar a otros dos o tres compañeros.

Al respecto, el fiscal Alistair Neil Macdonald dijo que este fue un ataque cuidadosamente planeado y ejecutado, en el transcurso del cual Richard Huckle fue sometido a una agresión prolongada y diseñada también para humillarlo y degradarlo. Sin embargo, el responsable se declaró inocente del delito de asesinato.

Tras la revisión de un psiquiatra, se determinó que en el momento del ataque el acusado sufría psicopatía y trastornos de personalidad mixta y de identidad de género, aunque su condena aún no ha sido revelada. En cuanto a Richard Huckle, este había sido condenado en el 2016 a 22 cadenas perpetuas por violar a 191 menores de entre 6 meses y 12 años mientras se desempeñaba como voluntario en orfanatos de Malasia y Camboya.

El exfotógrafo fue arrestado en 2014 al descender de un avión en Inglaterra, pues pretendía pasar Navidad con su familia, quienes por supuesto ignoraban sobre los terribles actos cometidos por el padre. Las autoridades revelaron que el cuerpo sin vida de Huckle tenía condones atorados en la garganta.