Desarrolladorer de la vacuna rusa Sputnik V, demandará por difamación a regulador de Brasil , la Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria de Brasil (Anvisa) por difundir información falsa e imprecisa sobre la vacuna.

De acuerdo con los desarrolladores de Sputnik V, el regulador de Brasil Anvisa hizo declaraciones engañosas “sin haber testeado la vacuna”.

"Tras la admisión del regulador brasileño Anvisa de que no ha probado la vacuna Sputnik V, Sputnik V está iniciando una demanda por difamación en Brasil contra Anvisa por difundir intencionalmente información falsa e inexacta"

@Sputnikvaccine

Asimismo, aseguró que el regulador sanitario de Brasil desechó la carta oficial donde el Centro Gamaleya explica que no ha ningún adenovirus capaz de replicarse y que solo se utilizan vectores no replicantes desprovistos del gen E1 en la elaboración de Sputnik V.

Y es que el regulador sanitario Anvisa rechazó el 26 de abril de 2021 la importación de la vacuna contra Covid-19 Sputnik V, luego de que personal técnico advirtiera fallas en su desarrollo.

De acuerdo a el regulador sanitario de Brasil, había datos incompletos respecto a la seguridad y la eficacia de la inyección.

Regulador de Brasil no sometió a pruebas la vacuna Sputnik V

De acuerdo al regulador de Brasil Anvisa, se detectó que la importación de Sputnik V que se recibió el 26 de abril, presentaba un adenovirus capaz de replicarse.

Sin embargo, el Fondo de Inversiones Directas de Rusia (FIDR) citó al medio brasileño Súper, que publicó que el regulador de Brasil Anvisa no había sometido a Sputnik V a pruebas sobre la presencia de replicantes virales.

"La calidad y la seguridad de Sputnik V están garantizadas, entre otras cosas, por el hecho de que, a diferencia de otras vacunas, utiliza una tecnología de depuración de cuatro fases que incluye dos etapas de purificación cromatográfica y dos etapas de filtración de flujo tangencial"

Instituto Gamaleya

Los desarrolladores de Sputnik V rechazaron el 28 de abril las críticas de Brasil y afirmaron que carecen de bases científicas y opinaron que “la decisión de no permitir la importación de Sputnik V tiene un carácter político”.