Las “pruebas rápidas” de Covid-19 que se aplican a Donald Trump y el resto de los trabajadores de la Casa Blanca tienen casi la mitad de probabilidades de error, de acuerdo a un reporte de la Universidad de Nueva York.
El test, llamado ID NOW, que fue creado por Abbott Laboratories, fue alabado en su momento por su capacidad de dar un resultado positivo en 5 minutos y uno negativo en 13.
Sin embargo, en el caso de las pruebas que son aplicadas mediante un hisopo seco por vía nasal, las pruebas presentaron fallas de hasta un 48% de fallar en detectar resultados positivos.
La revelación llega después de que al menos una mitad de trabajadores de la Casa Blanca resultaran positivos por el virus, incluyendo un asistente personal de Trump y la Secretaria de Prensa del vicepresidente Mike Pence.
La falta de certeza sobre quién está infectado o no de la enfermedad en la Casa Blanca ha provocado que algunas de las personas que ahí laboran se sientan temerosas de seguir asistiendo a trabajar.
La prueba rápida fue autorizada para su uso por las autoridades norteamericanas apenas a fines de marzo pasado.
En su momento, el propio Trump alabó esta prueba, en una presentación en la Casa Blanca, señalando que se trataba de un test “altamente preciso”.
Por su parte, voceros del laboratorio señalaron que los investigadores de la Universidad de Nueva York que llevaron a cabo las pruebas no las manejaron correctamente y que su tasa de falsos negativos es de apenas un 0.02%.