En los últimos años, el botox ha cobrado fama por su aplicación en tratamientos antiarrugas, pero esa es sólo una de las muchas posibilidades que tiene su uso en la medicina. Especialistas del IMSS utilizan la toxina botulínica en un tratamiento innovador contra la migraña, enfermedad que llega a producir discapacidad.

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IMSS prueba tratamientos innovadores

Según datos del INEGI, en México alrededor de 20 millones de personas sufren este padecimiento, caracterizado por dolor de cabeza intenso, náusea, vómito, molestias con la luz y ruido.

Ante esa problemática, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) ha comenzado a implementar nuevos tratamientos, como la aplicación de la toxina botulínica, que tiene la capacidad de producir parálisis muscular.

¿Cómo se usa la toxina botulínica en el tratamiento contra la migraña?

Irma Leticia Candelaria Zavala, neuróloga del Hospital de Especialidades del Centro Médico Nacional La Raza, señaló que el tratamiento consiste en aplicar esta neurotoxina alrededor del cráneo. 

Además de este procedimiento, la especialista destacó que el Seguro Social brinda otros tratamientos para evitar o reducir la intensidad del dolor de cabeza, con medicamentos antiinflamatorios no esteroideos.

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Por ejemplo, indicó, se utilizan fármacos denominados triptanos, que se aplican por inyección bajo la piel o por aerosol nasal, eficaces contra el dolor agudo y actúan en un tiempo aproximado de 10 a 15 minutos.

Asimismo, resaltó las bondades del tratamiento preventivo o profiláctico, en el que el paciente toma fármacos antidepresivos, antiepilépticos o beta bloqueadores de manera diaria, a fin de reducir la frecuencia del dolor.

La migraña, una enfermedad incurable pero que puede controlarse

Candelaria Zavala señaló que aunque la migraña no se cura, sí puede ser controlada con tratamiento preventivo para mantener al paciente libre de dolor por cinco, 10 o hasta 15 años.

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Finalmente, pidió no automedicarse ante cualquier dolor de cabeza sin causa aparente y acudir con el médico familiar, quien definirá si el paciente requiere ser canalizado con el especialista para su revisión mediante estudios de tomografía o resonancia.

Con información de Notimex y DGCS de la UNAM.