Tras el informe de la presunta muerte por parte de varios medios de comunicación, la activista Jazz Bustamante, a través de Homosensual, aclara que el joven gay víctima de homofobia no murió.

A decir su testimonio, Víctor Hugo Amador se encuentra hospitalizado luego de que el pasado 4 de julio un grupo de mecánicos le dispararan en por lo menos dos ocasiones; una en la cabeza, mientras caminaba por las calles de Tehuacán, Puebla.

Lo ocurrido, cuenta Bustamante, es que el joven tuvo que ser conducido de emergencia en un auto particular al hospital más cercano, ya que la ambulancia que solicitaron algunos vecinos nunca llegó, y en la Cruz Roja se negaron a atenderlo debido a que su familia no contaba con los recursos para cubrir los gastos.

El trayecto duró aproximadamente una hora de camino y tardaron otros 30 minutos en atenderlo, nuevamente a falta de dinero para pagar su estadía. Lo anterior provocó que Víctor Hugo Amador perdiera mucha sangre, pero no murió ni sufrió daño cerebral.

La activista, que afirma estar en constante comunicación con la familia, informa que el muchacho se encuentra en un estado delicado debido a que los médicos no han logrado remover la bala de la cabeza. Todo esto además de que sus familiares deben pagar 20 mil pesos al hospital municipal, mismos con los que no cuentan.

En consecuencia, solicitan apoyo para recaudar fondos en la cuenta Santander 5579083006062489 o, en caso de no poder donar, exigir justicia a la Fiscalía General de Puebla para esclarecer los hechos, así como pedir a la Cruz Roja Mexicana respetar su código de ética y no negar el apoyo a los pacientes de escasos recursos.