El Juego 1 de la Serie Mundial entre Dodgers y Medias Rojas fue histórico para Julio Urías, quien se convirtió en el lanzador mexicano más joven en lanzar en un Clásico de Otoño desde que lo hiciera el histórico Fernando Valenzuela.

Con tan solo 22 años, el oriundo de Sinaloa debutó en la Serie Mundial al entrar como relevo en la sexta entrada, en la cual permitió un hit, una carrera y en la que recetó dos chocolates; sin embargo, el equipo de Los Ángeles terminó pediendo el primer juego de la serie 8-4 ante los de Boston.

Mientras que Fernando Valenzuela debutó a los 20 años en el tercer juego de la Serie Mundial de 1981 entre los Dodgers y los Yankees de Nueva York. En aquél encuentro, Valenzuela permitió cuatro carreras en las primeras tres entradas, pero se vio dominante en las siguientes seis al no recibir ninguna carrera, lograr el juego completo y llevarse la victoria.

Los Dodgers de 1981 ganarían los siguientes tres juegos para superar 4-2 a los de Nueva York y coronarse campeones de las Grandes Ligas.