El ladrón es hoy decente<br>A la fuerza se ha hecho gente<br>Va no encuentra a quién robar<br>Y el honrao se ha vuelto chorro<br>Porque en su fiebre de ahorro<br>Él se "afana" por guardar<br>Hoy se vive de prepo<br>Y se duerme apurado<br>Y la barba hasta a Cristo<br>Se la han afeitao<br>Hoy se lleva a empeñar<br>Al amigo más fiel<br>Nadie invita a morfar<br>Todo el mundo en el riel
Enrique Cadicamo / Jose María Aguilar, ‘Al mundo le falta un tornillo”
‘Servidora de la nación’, apodada #LadyProle
De rencor, hipocresía, desvergüenza e intransigencia se pinta la 4T.
El cinismo aumenta día con día; el país poco les importa, el poder se usa para satisfacer viejos resentimientos.
Se da a cualquier nivel. Basta atestiguar el rencor expresado en forma de discriminación de una ‘servidora de la nación’, hoy apodada #LadyProle en la redes sociales: “¿qué, le roban la vacuna a la prole?”. Afortunadamente fue grabada en el acto, así como recibiendo una respuesta justa: “no politice, señorita. Aquí no hay prole, hay adultos mayores”. La vacunación en México en estos momentos es para todos los adultos mayores, independientemente de la condición socioeconómica de estos.
{username} (@chuforobles) February 28, 2021
Una mezcla de soberbia, desconocimiento de los derechos humanos y aires de dictadorzuelo en ciernes la sentencia de Gerardo Fernández Noroña al arremeter contra Aeroméxico desde la tribuna legislativa por haber “permitido” que un puñado de viajeros insultara a Andrés Manuel López Obrador al finalizar un trayecto. ¿En serio? ¿Ahora la gente ya no se puede expresar por el simple deseo de un legislador? ¿La empresa debe actuar conforme a los designios de este? El diputado ataca la libertad de manifestación consagrada en nuestra Constitución, además de que busca tornarse en el censor de las empresas de servicios.
Muchas de sus videocolumnas están plagadas de las mismas o peores expresiones escuchadas ahora proferidas contra AMLO. Entonces, ¿cuál es aquí la controversia? ¿O él si las puede utilizar y quienes se manifiestan contra el presidente no pueden pronunciarlas? De ese tamaño la simulación.
La probada desvergüenza del presidente López Obrador y de su subordinado Hugo López-Gatell, quienes sí pudieron utilizar el Remdesivir para ser curados del covid; medicamento al que las autoridades (¡ellos mismos!) le han negado permiso para su uso generalizado en México. Primero Gilead, la empresa que lo fabrica, liberó su patente para disminuir su costo y ampliar su suministro hasta que la OMS declare el final de la emergencia sanitaria, que Cofepris y López-Gatell se dignen a reconsiderar su prohibición en el país.
Eso no solo es intransigencia, es un odio visceral contra el resto de los ciudadanos comunes y corrientes que se enferman gravemente del virus.
¿Pero qué esperar de un primer mandatario quien, mientras la gente muere, mientras se atraviesa la peor crisis económica, mientras el desempleo aumenta, se “escapa” a jugar beisbol en horarios de trabajo? Estamos sufriendo a un sinvergüenza vestido de populacho.
¿Quiero saber en qué trabajo permiten a sus empleados salir a media jornada a jugar un rato? Claro, eso sí, él y su gabinete continúan sin desplegar un plan de apoyo real a las empresas (y empleados) de cara a la pandemia, como en la mayor parte de los países.
Pero la hipocresía continua. Tenemos a unos funcionarios del poder Judicial, a unos ministros cuatroteros, que se vacunaron contra el covid en los Estados Unidos. Para ello, tramitaron con quién sabe qué excusas una residencia más allá del Río Bravo. Y esto es lo que sabemos de servidores públicos de la 4T, que mediante la tramitación de una residencia exprés, se les permitió vacunarse en EEUU. No quiero ni pensar de otros que ya de por sí contaban con la residencia por tener allá diversas propiedades...
Independientemente de que el término lo usó y hasta lo abusó Carlos Salinas, la solidaridad de los servidores públicos de este régimen federal brilla por su ausencia.
Falsedad, soberbia, prejuicios y venganzas infundadas, eso es la 4T; dibujada de cuerpo entero.