“El verdadero modo de vengarse de un enemigo es no parecérsele.”<br>

Marco Aurelio

La 4T, incluyendo a un órgano supuestamente autónomo, pero que más bien actúa como comparsa de Palacio Nacional, pasará también a la historia cómo el régimen que intentó (espero un no “logró”) imponer sanciones más desproporcionadas e función de vendettas políticas. Primero, esta semana, la exhorbitante multa y la injustificada inhabilitación a la revista Nexos. Luego, ahora, la FGR solicitando ¡21 años de cárcel para Rosario Robles!

El delito de la que la acusa el Estado mexicano es de omisión (esto es, no prevé prisión preventiva oficiosa / Art. 214 F.III Código Penal federal): haber permitido el daño al erario por más de 5 mil millones de pesos. De comprobarse (pues aún no es cosa juzgada), sin lugar a dudas sería un tremendo desfalco al erario, pero lo increíble es que ella NO lo robó y sin embargo solo a ella tienen presa y es contra ella que solicitan semejante castigo. Lleva más de un año encerrada y quienes aparentemente cometieron la malversación de fondos siguen libres.

Irónico: fue gracias a una investigación de Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad y de Animal Político, esas organizaciones que son tan denostadas por el presidente AMLO, que el asunto de la estafa maestra se convirtió en una bandera de campaña de la 4T. Pero, la verdad, se esperaban muchas aprehensiones y que se regresara el dinero malversado, no la aprehensión de Rosario Robles por un delito que no justifica las acciones judiciales emprendidas contra ella.

La objetividad de buscar justicia y que los delincuentes de cuello blanco paguen por sus culpas se desvanece cuando se recuerda que el juez quien dictó sentencia es sobrino de la senadora Dolores Padierna (Felipe de Jesús Delgadillo Padierna). El mismo quien la vinculó a proceso y dictó prisión preventiva. No olvidemos el acérrimo odio que se tienen Padierna y Robles. Entre ellos la pérdida de la libertad por el esposo de Padierna y una larga lista de desencuentros económicos y de liderazgo. Claro conflicto de intereses. Y a mantener a Robles en la cárcel sin un justo proceso y con amplias interrogantes a la imparcialidad del juez se suma ahora una Fiscalía que solicita una pena máxima...

Que rueguen ahora juez y fiscal que Rosario Robles no contraiga el covid en la cárcel y/o que su vida no corra peligro. De llegar a ocurrirle algo, el fiscal Gertz y el juez Delgadillo Padierna pagarán caro haber antepuesto intereses políticos y personales a los jurídicos. Rosario Robles pasará de ser su “corrupta irredenta” a LA víctima del sistema.

Mal, muy mal la forma en que se lleva el proceso de Rosario Robles. La saña solo deja ver que todo esto es una venganza política y un maltrato por cuestión de género. Todo menos dar y proveer justicia.