Desde hace días Valle de Bravo se ha convertido en tendencia por ser uno de los lugares más socorridos por los turistas para disfrutar de la temporada de Día de muertos.

El Festival de las Almas se llevó en un formato híbrido y en los pocos eventos presenciales que se tuvieron, puedo destacar que el concierto de la marimba “Nandayapa” donde se mantuvo un aforo de 50 personas con sana distancia.

La directora general de patrimonio y servicios culturales del Estado de México, Ivett Tinoco sí bien ha destacado que es un evento que cumple con 18 años ha sabido cómo mantener vivo el festival dedicando gran parte en un formato virtual y con una temática más sobre el sur del país.

Demostrando las riquezas culturales que México puede ofertar aún en tiempos de pandemia para todos aquellos que no pueden disfrutar de loa presencial.

Pero esto sólo ha sido una pequeña muestra de lo que este destino puede ofrecer, puesto que ahora se ha convertido en un lugar donde la gente puede disfrutar de varias actividades al aire libre.

El ejemplo perfecto puede ser la fama que ha obtenido en la actividad del parapente que uno pude conseguir con “alas del hombre” cuyos pilotos llevan años entrenando y algunos compiten en las competencias.

Por otra parte, las actividades de velero, el senderismo o bien el ciclismo también se han convertido en un referente en estos tiempos de pandemia.

Lo cual lo hace un destino carretero para empezar con una reactivación local y beneficiando actividades al aire libre para evitar contagios.

Si bien Valle de Bravo sigue siendo un referente más para los capitalinos, hoy tiene una oportunidad enorme para exponencial el destino de naturaleza de forma responsable, siempre y cuando se tengan todas las medidas sanitarias y se eviten aglomeraciones que puedan ocasionar un mayor número de contagios.