Las balaceras, persecuciones, narcobloqueos y encontronazos entre grupos delictivos y fuerzas federales que se vivieron en Tamaulipas, han disminuido considerablemente, tanto que llegaron “Los Ángeles Azules”, hasta las carreteras del estado.

Del Tamaulipas que recibió el gobernador Francisco Javier García Cabeza de Vaca, en 2016 al ambiente social que se vive el día de hoy, hay un mundo de diferencia. Hay tantos intereses de por medio, que pareciera que es un Nuevo Tamaulipas del presente.

Esto no quiere decir que todo es miel sobre hojuelas, tampoco que dejaron de exigir y existir los grupos delincuenciales, pero algo han hecho bien los ciudadanos: obligar al gobierno a dar resultados y el estado, a comprometerse con sus representados.

Un ejemplo claro es la inauguración del tercer Complejo Regional de Seguridad Pública Estatal, con una inversión de 246 millones de pesos. Está construido en la zona costa, en la Ciudad de Altamira; cuenta con dormitorios para albergar a 640 policías, comedor, área administrativa, plaza cívica, gasolinera, instalaciones deportivas y campo de infantería, fortaleciendo así, la infraestructura de seguridad.

Tampoco se crea que fue una genialidad únicamente del gobernador tamaulipeco. En los innumerables resultados favorables, mucho tuvo que ver el involucramiento de la sociedad civil, que exigió más sesos a los políticos tamaulipecos ligados a los vientos de cambio; también, un porcentaje del éxito se lo lleva el nivel de escucha que tiene el mandatario, pues se encontró con unos tamaulipecos que no solo se quejan, sino que también, aportaron soluciones a la crisis de inseguridad. Para quienes no lo tienen claro, Altamira, es un municipio conurbado a Tampico, la capital de las huastecas y ciudad más importante de todo Tamaulipas.

Con lo anterior el tamaulipeco más rebelde del país, se da el lujo de reiterar que gracias al trabajo conjunto con las Mesas de Seguridad y los Sectores Productivos que han confiado en su Gobierno, al trabajo y la coordinación con el Ejército Mexicano, Marina Armada de México y Guardia Nacional, hoy en día, Tamaulipas ocupa el lugar número 26 en incidencia delictiva, producto del esfuerzo y compromiso de dar resultados que exigen y demandan los tamaulipecos.

“Falta mucho por hacer pero no bajaremos la guardia, actuaremos con firmeza, determinación y sobre todo voluntad política para combatir el fenómeno de la criminalidad", aseguró el Gobernador en la ceremonia de inauguración.

Y no sólo eso, la voluntad política es lo que le ha dado mucho a ganar al cabecismo; pudo instaurar gracias a ello, a la Policía Estatal de Proximidad, así como la Policía Estatal de Auxilio Carretero y las Estaciones TAM, para resguardar las vías de comunicación del estado.

Puso en marcha además, el Grupo de Operaciones Especiales (GOPES), la ampliación de la Universidad de Seguridad y Justicia de Tamaulipas, la construcción de un C5 en el municipio de Reynosa que operará más de 4 mil cámaras de videovigilancia a nivel estatal y periódicamente continúa dotando a la Policía Estatal de vehículos, equipamiento y armamento para fortalecer sus tareas.

Ahora, habrá que esperar que de todo eso, se acuerden los electores, pues al parecer en la contienda electoral las cosas se van a poner color de hormiga. Sumar todos los factores para asegurar el triunfo algo a lo que le saben a la perfección “El Truco”, César Augusto Verástegui Ostos y su jefe “Cerbero”, Francisco Javier García Cabeza de Vaca. Veremos si el tiempo y el electorado, les dan la razón.

davidcastellanost@hotmail.com