He leído que en días pasado la nota (desconozco si la propia Beatriz confirmó la misma) de que la esposa de AMLO va a lanzar una canción interpretada por ella misma del gran compositor, que por cierto admiro, Armando Manzanero. La lluvia de insultos, descalificaciones y agresiones no se hizo esperar. Me pareció excesivo, y muy agresiva tanta crítica, pero es quizá por un asunto personal que quisiera clarificar: amo cantar. Cantar ha sido la manera que he encontrado de sobrevivir ante muchas adversidades en mi vida. Y no canto mal, dicen. Incluso llegué a grabar un demo para un grupo musical que en los noventa tuvo auge. 

El tema es que hoy, que estamos en la era #MeToo —en la que deberíamos solidarizarnos con toda aquella mujer agredida, de la manera que sea, como sea—, me parece que estamos siendo un poco incongruentes como mujeres. Defendemos, pero atacamos.

Y he aquí mi reflexión en cuanto a la nota anteriormente referida. ¿Que Beatriz Gutiérrez Müller quiere lanzar una canción de Armando Manzanero? ¿Y por qué no?! He de decir que no soy proAMLO, pero sí proMujeres y amo cantar, como lo dije anteriormente. Si la señora Gutiérrez Müller decidió lanzar una canción, está en su derecho y congruencia, puesto que decidió no titularse como “primera dama” —cargo honorífico que quizá pensó es mucho peso, mucha responsabilidad, mucho no sé cómo llevar todo esto: las razones no las sabemos a fondo—, insisto, está en su derecho y no deberíamos de atacar su acción de manera tan agresiva, principalmente porque, lo he vivido en carne propia, la música te salva la vida y salva a muchas personas; en segundo lugar, cada mujer debe saber qué decide, qué piensa, qué hace y qué le satisface sin necesidad de subordinarse a lo que diga el marido/amante/novio. Entonces, ¿por qué entre mujeres nos atacamos, nos aplastamos?

Hay gente que me dice: “ Claudia, no confundas tu gusto por cantar con el de la esposa del Presidente que debería de dedicarse a atender otras cosas”.  Beatriz Müller dijo desde el principio: NO quiero ser primera dama. Y así votaron por su pareja (que yo no voté por Andrés Manuel, pero respeto a quien lo que haya querido hacer: estoy harta de estos términos: chairos, derechairos y demás), luego entonces, está en su derecho de intentar hacer de su más grande pasión, que es cantar, una realidad. La mía ha sido cantar y cantaré siempre hasta morir. Si yo pudiera cantaría todos los días a todas horas para mucha gente, pero no, no tengo quórum, no soy famosa ... pero ¿y si ella puede?, ¿por qué no? Es decir, reflexionemos: ¿y por qué no? Entendamos, ¿por qué pisotear la decisión, el gusto, el placer o hooby de una mujer que quiere hacer lo que quiere? ¿Qué mensaje hay de odio hacia una mujer de parte de otras mujeres?

Cuántas mujeres no hemos visto al frente de el DIF (que por lo general es dirigido por esposas mandatarios ) hechas un caos. ¿Y las otras esposas presidenciales? ¿Qué hicieron en el DIF? Entonces, ¿desde dónde viene este ataque? Seamos sinceras, reflexivas y profundicemos: ¿a quién le hace mal la música? ¿O quién hace más daño, una primera dama que ya vimos que no aceptó este título, lo cual yo agradezco como mujer, pero canta, o unas esposas de presidentes que dijeron que protegerían la infancia y la vida y las instituciones a capa y espada y no hicieron NADA más que viajar y pasearse

¿Ustedes Qué Piensan?