Como cuando tu papá es lo mejor del mundo y antes de partir para siempre te juega una última broma sólo para hacerte reír en uno de los momento que sabe, será de los más difíciles de tu vida.

Porque nadie está preparado para la muerte de un padre, Shay Bradley, un irlandés consciente de que se encontraba en sus últimos días de vida, tomó su teléfono celular y grabó un último mensaje para su familia, ordenando que lo pusieran a todo volumen el día de su funeral.

Graba mensaje para su propio funeral y hacer llorar a su familia

Y así fue. En pleno entierro, los hijos cumplieron con la voluntad de su padre y reprodujeron en una bocina sus últimas palabras. ¿El resultado? un estallido de risas que les mostró que la vida es tan bonita, que incluso alrededor de la muerte muestra destellos de amor y esperanza. 

"Este fue el último deseo de mi padre, siempre bromista. ¡Conseguiste trollearnos y nos hiciste reír a todos justo cuando lo necesitábamos! Te amaré por siempre"

Andrea Bradley, hija del fallecido.

Su padre, a quien ya no podrán volver a tocar, les dejó dejado para siempre uno de los recuerdos más memorables de su existencia antes y después en la Tierra. Algo magnífico que aún no nos hemos podido explicar, pero que no habríamos podido presenciar si no fuera por la tecnología.  undefined

Un exmilitar que vivió siempre con una sonrisa en el rostro

¿Y qué dijo Bradley para causar la risa de toda su familia? Bueno... sólo pidió que lo sacaran del ataúd porque estaba muy oscuro allí adentro. Las imágenes muestran que aunque la familia parecía confundida en un inicio, en algún punto todos los presentes comienzan a reír porque ya no pueden contenerlo. 

"¿Hola? déjenme salir, está muy oscuro aquí dentro", dijo el padre, un también exmilitar cuyo humor fue una de sus mejores características. Entre los recuerdos más vivos de sus hijos están los incontables momentos en los que Shay los hizo levantarse con un chiste.