A los 12 años, J.K. fue diagnosticado con leucemia y las varias cirugías para mantenerlo con vida el mayor tiempo posible dieron inicio. A pesar de lo delicado de la situación, su mejor amigo Kaleb Klakulak nunca dejó de visitarlo en el hospital de Michigan y de jugar con él como si nada estuviera pasando. 

Pero K.J. no resistió mucho y perdió la batalla a causa de una insuficiencia cardíaca congestiva, pero su familia no contaba con los recursos suficientes para el entierro y la lápida, así que Kaleb comenzó a trabajar para ayudar con los gastos hasta que se le ocurrió abrir una cuenta PayPal.

Foto: Kaleb Klakulak y su mejor amigo K.J. antes de las cirugías. 

Así recibió 900 dólares en donaciones (18 mil 110 pesos) que le ayudaron a la mamá de K.J. a contar con un lugar donde visitar los restos de su hijo, aunque las aportaciones voluntarias continuaron llegando. Finalmente, Kaleb recaudó 50 mil 306 pesos.