“Sabíamos que se iban a ir juntos”, afirma Nicoletti, al hablar sobre su padre y su mejor amigo, un perro labrador, quienes fueron inseparables en vida y también cuando dejaron este mundo, ya que encontraron la muerte el mismo día, con sólo minutos de diferencia.

Daniel Hove, fue un ciudadano de Estados Unidos que perteneció a la Fuerza Aérea y después se unió a los bomberos. En 2011 tuvo que dejar la corporación debido a que le fue diagnosticado un cáncer de páncreas.

El hombre enfrentó la agresiva enfermedad con el apoyo de su familia, aunque hubo alguien que se volvió prácticamente su sombra, ayudándole a sobrellevar los momentos de tristeza e impulsándolo a sobreponerse tras cada uno de sus tratamientos: Gunner, su perro fiel.

La salud de perro y dueño se fue debilitando al mismo tiempo

La familia asegura que la conexión dueño-mascota era tan fuerte que incluso cuando Daniel se sentía mal, el perro también padecía dolencias.

“Cuando mi papá se agitaba, el perro se agitaba, si mi papá estaba inquieto, el perro estaba inquieto. Mi papá no respondía y Gunner tampoco”. <br>

Heather Nicoletti, hija de Daniel Hove.

En entrevista para el canal Kare 11, Heather Nicoletti, hija de Hove, recordó que poco a poco Gunner fue volviéndose menos activo, lo que les hizo saber que se acercaba su fallecimiento.

“Sabíamos que se iban a ir juntos"

Y es que, tal como su dueño, el perro también había sido diagnosticado con una enfermedad -no especificada por la familia- que le hizo perder movilidad, debido a la hinchazón de sus patas y mostrarse apático.

Para terminar con su sufrimiento, los Hove decidieron llevar al perro a un veterinario, donde le pusieron una inyección y murió el pasado 18 de mayo. 

La familia apenas intentaba asimilar la pérdida del perro, cuando una hora y media después también murió Daniel. Ante esa situación, Heather afirmó:

“Sabíamos que se iban a ir juntos, pero no que iban a estar separados por horas”.

Heather Nicoletti, hija de Daniel Hove.

La mujer consideró que sus lazos de amistad eran tan fuertes que ni siquiera la muerte pudo mantenerlos separados por mucho tiempo.

“Fueron los mejores amigos hasta el final. Gunner no podía estar sin mi papá, creo que eligió ir con él”.

Heather Nicoletti, hija de Daniel Hove.