Un niño residente de Argentina se ganó el corazón de miles de personas alrededor al mundo al escribir una tierna carta en la que seguro representa a muchos de sus compañeros, y es que el menor de edad deja claro que está feliz de volver a las clases presenciales. La foto ha circulado ampliamente en Facebook.

Esto, luego de que por lo menos 370 mil alumnos de Argentina regresaran a las escuelas de manera presencial el pasado miércoles 17 de febrero de este 2021, tras el largo cierre impuesto debido a la actual pandemia de Covid-19 que inició en marzo del 2020, cuando se cerraron las puertas de las instituciones educativas del país.

La enternecedora carta de un niño tras volver a clases

Entre los miles de niños que volvieron a las clases presenciales en Argentina, hubo uno que se hizo viral gracias a una enternecedora carta en la que, junto a un dibujo donde se aprecia a dos niños jugando en una resbaladilla en medio de un jardín, el menor expresa su sentir al estar de nuevo en las aulas.

"¿Cómo me siento? Bien, me gustaría nunca irme de las clases"

Niño en su carta.

Su genuino sentimiento lo hizo acreedor de una excelente nota por parte de su maestra, que escribió en la carta un "Hermoso" y que además, decidió compartir la creación del niño en redes sociales como una manera de explicar lo difícil que ha sido para los más pequeños adaptarse a las clases virtuales.

Carta de niño

Implicaciones del Covid-19 en los niños

La Secretaría de Educación, Ciencia, Tecnología e Innovación (SECTEI) de la Ciudad de México realizó una webinar (conferencia web) sobre las consecuencias del coronavirus en la salud mental, donde se expuso las implicaciones del Covid-19 en los niños, que al ser muy sensibles al exterior debido a su etapa de crecimiento, han vivido factores estresantes ante la pandemia.

A ellos les ha afectado la falta de contactos con amigos y de socialización, pues en el confinamiento son físicamente menos activos, están más horas frente a la pantalla, sufren patrones irregulares de sueño, así como dietas menos sanas, violencia, miedo a la infección, aburrimiento, falta de espacio e inestabilidad financiera. En suma, su capacidad cognitiva no se desarrolla con naturalidad.